Xavi Hernández parecía tener claro el destino de Ansu Fati desde el inicio de la pasada temporada. El técnico catalán decidió que el canterano, quien portaba el icónico dorsal '10', no encajaba en sus planes y optó por cederlo al Brighton. Sin embargo, la cesión del atacante español no cumplió con las expectativas, dejando una sensación de oportunidad desaprovechada tanto para el jugador como para el FC Barcelona.

En el Brighton, Ansu Fati no logró recuperar la chispa que lo convirtió en una de las grandes promesas del fútbol mundial. A pesar de contar con minutos en la Premier League, sus actuaciones estuvieron lejos de ser determinantes. Este bajo rendimiento reforzó la percepción de Xavi Hernández, quien desde su etapa como entrenador del Barça había insistido en que el canterano necesitaba un cambio de aires para redescubrir su mejor nivel. Ahora, bajo el mando de Hansi Flick, la situación no ha mejorado para Ansu, y el técnico alemán también parece haber perdido la fe en el jugador.

Ansu Fati manos cara / Foto: Europa Press
Ansu Fati manos cara / Foto: Europa Press

Flick, quien llegó al banquillo azulgrana con un enfoque renovador, ha evaluado cuidadosamente a su plantilla en estos meses. Aunque se le dieron algunas oportunidades, Ansu Fati no ha convencido al entrenador ni al cuerpo técnico. En un equipo que busca la excelencia en todas sus líneas, el rendimiento del joven atacante no está a la altura de lo que se espera de un jugador del FC Barcelona. Por ello, Flick ha dado luz verde a su salida, una decisión que parece irrevocable y que podría concretarse en el mercado de enero.

La idea del club es encontrar una solución que beneficie a todas las partes. Mientras Deco trabaja en el mercado, el objetivo principal es que Ansu Fati pueda encontrar un equipo donde tenga un rol importante y recupere la confianza perdida. Equipos de LaLiga y de la Premier League ya han mostrado interés, aunque aún no hay una propuesta concreta sobre la mesa. Lo que sí parece claro es que el Barça buscará incluir alguna cláusula que les permita mantener cierto control sobre el futuro del jugador, como una opción de recompra.

Para el FC Barcelona, desprenderse de Ansu Fati simboliza también un cierre de capítulo. Aunque en su día fue visto como el sucesor de Lionel Messi, la presión y las lesiones han mermado su progresión. Con Flick apostando por una plantilla competitiva y jugadores en plena forma, el adiós de Ansu parece inminente. Solo el tiempo dirá si el talentoso canterano logra renacer lejos del Camp Nou.