En un mundo en constante movimiento como es el de MotoGP, es normal ver un sinfín de movimientos en cuanto a los pilotos cambiando de equipos. Sin ir más lejos, la parrilla se ha visto modificado este año con varios protagonistas cambiando de garaje, aunque manteniéndose en la categoría reina. Ha sido el caso de hombres como Luca Marini, Fabio Di Giannantonio, Franco Morbidelli, Alex Rins, Johan Zarco, y el más destacado, Marc Márquez, que ha dejado Honda después de 11 años, para subirse a la Ducati del Gresini.
La única cara nueva este año será la de Pedro Acosta, que ha dado el salto a MotoGP después de conquistar el mundial de Moto2, donde compartirá box con el rookie de 2023, Augusto Fernández, en el equipo satélite de KTM, GasGas Tech3. Sin embargo, los grandes protagonistas serán Marc Márquez y Alex Márquez, que compartirán box en la escudería de Faenza. Un movimiento que ha generado ilusión, al mismo tiempo que terror, en el equipo oficial de Ducati.
Los Márquez acaparan los focos
Una situación que ya ocurrió en 2020, con el pequeño de los Márquez en Honda, aunque duró muy poco por los problemas físicos del octocampeón del mundo. "2024 pinta bien. Estuvimos juntos en 2020, pero no duró mucho por su lesión en el brazo, pero la vida a veces da segundas oportunidades y creo que esta es muy buena", remarcó Álex en una entrevista a El Desmarque.
"Estoy con ganas de que él también pruebe la moto y me dé su opinión, es verdad que es tu compañero de equipo, que se dice que es tu primer rival y así es, pero esa complicidad y esa rivalidad te ayuda a que tú también des un paso adelante. Tengo que mejorar en la constancia; si lo hago, creo que podré estar el año que viene entre los cinco primeros", añadió el pequeño de los Márquez.
El piloto de Gresini parece haber encontrado su sitio en la escudería de Faenza, donde esta temporada ha conseguido su primera victoria en MotoGP, en una carrera al esprint. Sin embargo, sabe que con una de las mejores motos de la parrilla deberá demostrar que es más que el hermano de Marc.
Yamaha veta a la familia Márquez
Y es que, lejos de ser algo positivo para Álex, estar a la sombra de su hermano le ha comportado muchos problemas. El pequeño de los Márquez ha recibido muchas críticas y se ha llegado a decir que, al no estar a la altura de Marc, no tiene el nivel suficiente para estar en la categoría reina, algo que no es cierto.
Otra de las situaciones más llamativas para Álex, en el aspecto negativo, ha sido el veto de Yamaha. Y es que, hay veces, que por mucha calidad que tengas, hay puertas que se cierran. Es el caso de la escudería japonesa, que ha vetado a la familia Márquez, tal y como se ha revelado en un documental en Dazn sobre el pequeño de los Márquez.
De hecho, Álex Márquez tenía firmado un contrato con Yamaha, que acabó en agua de borrajas. "Habíamos firmado, pero Yamaha dijo que no. Ningún miembro de los Márquez puede estar en el equipo", asegura el protagonista. "Siempre seré cuestionado por ser el hermano de Marc, pero soy Alex también", cierra el piloto.