El Real Madrid volvió a salvar un partido en la Champions League gracias al talento de sus atacantes. Aunque atendiendo a la enorme cantidad de ocasiones el marcador tendría que haber sido más abultado, los blancos se valieron de los dos goles en la primera media hora de partido para mantener la perfección en Europa, con nueve puntos sumados de los nueve disputados. Que los de Carlo Ancelotti volvieran a ganar y pusieran un pie y medio en los octavos de final de la máxima competición europea fue, en buena medida, gracias a la actuación de uno de sus futbolistas, el brasileño Rodrygo Goes.
Rodrygo marcó y asistió en la victoria contra el Shakhtar Donetsk
Porque el joven extremo brasileño marcó uno de los dos goles y regaló el otro. Primero, hizo una pared involuntaria con un rival, lo que le brindó la oportunidad perfecta de definir ante un Trubin que no estaba muy bien colocado bajo palos y no pudo evitar el 1-0 en el minuto 13. Un cuarto de hora más tarde, Rodrygo dio continuidad a una gran jugada trenzada por varios de sus compañeros y asistió a Vinícius Jr para que su compatriota marcara el segundo. Rodrygo volvió a demostrar que merece un hueco en el once, y Ancelotti lo sabe.
Porque el partido contra los ucranianos era el quinto consecutivo que el ex del Santos jugaba como titular. En toda la temporada, ya acumula cuatro goles y tres asistencias, sin ser fijo hasta estas últimas semanas, donde está siendo de los mejores en un equipo donde los focos suelen apuntar a futbolistas como Luka Modric, Karim Benzema o Vinícius.
Zidane llegó a dudar de que podía ser una estrella en el Real Madrid
Aunque ahora nadie duda de la importancia de Rodrygo en el Real Madrid, hubo en un momento, con Zinédine Zidane en el banquillo, que se llegó a dudar de si podría ser importante en el Real Madrid. Llegó a la Casa Blanca siendo apenas mayor de edad, y aunque demostraba su talento a cuentagotas, el técnico francés no acababa de confiar en él.
De hecho, se llegó a plantear su traspaso para evitar el riesgo de que si no salía bien pudiera devaluarse en exceso. Por suerte para el madridismo, Rodrygo se quedó y el que salió, por varios desacuerdos con Florentino Pérez, fue Zidane. Ahora, con 21 años, Rodrygo demuestra ser mucho más maduro, y el Real Madrid se está beneficiando de ello día sí y día también.