Imanol Alguacil no da crédito. Después de ver cómo se tambaleaba el futuro de Martín Zubimendi el pasado verano, ahora otro de sus pilares está en el punto de mira de un gigante europeo. Y es que Takefusa Kubo, una de las sensaciones más destacadas de la Real Sociedad, ha despertado el interés del Liverpool. El conjunto inglés ha puesto sus ojos en el talentoso japonés. El mercado de fichajes no da tregua y, tal como ocurriera con Zubimendi, la Premier está lista para volver a la carga.
El Liverpool sigue decidido a reforzar su plantilla con jugadores jóvenes y de calidad, y Kubo encaja a la perfección en ese perfil. Su evolución desde que llegó a la Liga española ha sido notable, convirtiéndose en uno de los nombres más recurrentes en las oficinas de Anfield. La cláusula de rescisión del nipón, que ronda los 60 millones de euros, no parece ser un obstáculo para los de Arne Slot, acostumbrados a grandes desembolsos por promesas que aseguren su futuro.
Desde el club donostiarra, la postura es clara: Kubo no se toca, salvo que alguien esté dispuesto a pagar su cláusula de salida. Pero el verano de 2025 puede ser un momento crítico para su futuro. Con Liverpool preparado para hacer una oferta definitiva, Kubo podría dar el salto a la Premier League, donde muchos clubes buscan un jugador con sus características. Esta situación no hace más que desquiciar a Imanol Alguacil, que sabe que perder a tantas piezas clave en tan poco tiempo sería un golpe duro para sus aspiraciones.
Todo esto ocurre después de que el Liverpool ya intentara fichar a Zubimendi pagando su cláusula este verano. El mediocentro vasco, por decisión personal, rechazó la oferta del club inglés, prefiriendo quedarse en San Sebastián para seguir siendo una de las referencias del equipo. No obstante, el interés del Liverpool por Zubimendi sigue vivo, y en Inglaterra se especula con un nuevo intento para llevárselo en el futuro cercano.
Con estos movimientos en el horizonte, Imanol no puede evitar sentirse inquieto. La posibilidad de perder a sus dos jugadores más influyentes, ambos objetivos de los gigantes de la Premier League, podría desbaratar los planes de una Real Sociedad que aspira a seguir compitiendo al más alto nivel en Europa.