El 4 Years From Now (4YFN) es una de las citas imprescindibles durante los días del Mobile. En la Fira de Montjuïc se reúnen más de 21.000 asistentes y 600 expositores, con un montón de nuevas ideas, apps y soluciones tecnológicas para todos los sectores. Entrar en el 4YFN es sinónimo de entrar en una incubadora de startups, con ambiciones de futuro, de crecimiento, de fichar nuevos inversores y nuevos clientes.
El salón paralelo al Mobile es al mismo tiempo una oportunidad de oro para la emprendeduría catalana. "Es un acontecimiento que se celebra en Barcelona pero tiene alma internacional", asegura Jordi Aguasca, gerente de Start-Up Catalonia, en una conversación con El Nacional. "Nuestros retos son los de incrementar el número de start-ups catalanas, conectarlas internacionalmente y crear comunidad", explica Aguasca, y "hacer de Barcelona y Catalunya un referente europeo como hub de start-ups y tecnología".
Y es que el ecosistema emprendedor en Catalunya crece "a ritmos vertiginosos", y el 4YFN "es una buena prueba". "Empezamos hace seis años con unos 2.000 asistentes y ahora ya son más de 20.000", asegura Aguasca. Barcelona está posicionando cada vez más como un 'hub' internacional a nivel de innovaciones tecnológicas, emprendeduría y atracción de talento: "Somos ya la cuarta ciudad que más dinero ha levantado con sus empresas, hasta 800 millones de euros y más de 120 operaciones financieras cerradas".
Queremos hacer de Barcelona y Catalunya un referente europeo en tecnología"
Dando un paseo rápido por los pasillos del congreso llama la atención la juventud de los expositores. Caras de entre 18 y 30 años son las que se acercan a los grupos inversores, explican sus proyectos y dejan a los asistentes con la boca abierta. Aplicaciones tecnológicas que van desde la realidad virtual aplicada a la salud hasta soluciones legales para grandes corporaciones y empresas; un mix de todo, desde ocio hasta soluciones para bancos.
Debajo el paraguas institucional de ACCIÓ, se reúne una veintena de startups de corazón catalán pero con el ademán de llegar a todo el mundo: "Ya operamos en China" o "Nuestros clientes más importantes son italianos" son algunas de las frases que se oyen entre los expositores catalanes.
En el fondo del recinto, al lado de la zona habilitada por las food trucks, encontramos una especie de salón donde los inversores y los congresistas se pueden reunir tranquilamente para hacer sus negocios. Un foco de intercambios de tarjetas, apretones de manos de mano, sonrisas y WhatsApps. Y rostros de todas las etnias, lenguas y culturas que, evidentemente, se comunican principalmente en inglés. Palabras como techpreneur, blockchain, 5G, IoT u opendata, entre otros, es el vocabulario predominante. Un jeroglífico tecnológico para todo aquel que no forme parte.
Es un acontecimiento que se celebra en Barcelona pero tiene alma internacional"
Una de las novedades de este 4YFN es una prueba piloto "que" pretende "hacer del 4 Years una plataforma para conectar corporaciones internacionales y start-ups". La idea se basa en que grandes empresas presentan retos o problemas con que se encuentran y las startups pueden idear soluciones para ellas, de manera que se crea un vínculo entre empresas maduras y crecidas y emprendedores. Esta propuesta es el primer año que se pone en práctica, y cuenta con 150 start-ups (50% internacionales) que han propuesto soluciones para las grandes corporaciones, y se han cerrado hasta 200 reuniones.