ACS obtuvo un beneficio neto de 351 millones de euros en el primer semestre del año, un 4,8% más respecto de un año antes gracias a la mejora del negocio y a la recuperación del tráfico de las autopistas de Abertis tras las fuertes caídas registradas durante la pandemia.
De hecho, la contribución de Abertis al resultado bruto de explotación (ebitda) y al beneficio neto mejoró en 77 y 62 millones de euros respectivamente, según las cuentas remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En la primera mitad del año, el ebitda alcanzó los 737 millones de euros, un 14,6% más, apoyado, precisamente, en la mayor contribución de Abertis.
En los seis primeros meses del año las ventas sumaron 13.330 millones, el 3,5% menos que un año antes, por el impacto de la evolución del dólar frente al euro (-9 %), aunque si no se considera este factor, se mantienen estables.
Las ventas en Estados Unidos ya representan el 53%
Por otro lado, las ventas del grupo en Norteamérica representaron un 60% del total (un 53 % solo en Estados Unidos); en Australia un 19%; Europa un 17%; Asia un 3% y Suramérica el restante 1%. Las ventas en España supusieron un 11% del total. A cierre del periodo, la cartera se situó en 63.993 millones, lo que implica un crecimiento del 3,3% ajustada a la evolución del tipo de cambio y al acuerdo de venta de Servicios Industriales a Vinci.
Infraestructuras registró un beneficio neto de 199 millones, el 48% más, gracias a la mayor actividad de Abertis. Por su parte, los ingresos alcanzaron los 12.412 millones, el 4,5% menos, lastrados por el tipo de cambio y la evolución de la pandemia en el mercado norteamericano. La cifra de cartera al final del periodo alcanzó los 61.363 millones.
Las ventas de Construcción alcanzaron los 12.363 millones, con una disminución del 4,6% frente al año anterior, mientras que el ebitda se redujo un 9,7% hasta 617 millones. La cartera de obras ascendió a 61.363 millones de euros y en un 96 % fue internacional. Concesiones volvió a reportar beneficios, de 42 millones, tras las pérdidas de 2020. Los ingresos de la división subieron un 43,7% hasta los 50 millones y el ebitda aportó 55 millones.
ACS ha destacado la sendade recuperación de Abertis con un crecimiento del tráfico medio del 22,4% y datos positivos en todas las regiones operativas, acercándose a los niveles previos a la pandemia. Por su parte, la actividad de Servicios Industriales obtuvo un beneficio neto de 270 millones, el 31% más, y su facturación alcanzó los 103 millones, el 70,7 % más, gracias a los activos energéticos retenidos por ACS tras el acuerdo de venta con Vinci.
Además, el área de servicios a la ciudadanía (CLECE) obtuvo unas ventas de 817 millones de euros, aumentando un 7,7% respecto al mismo periodo del año anterior. A cierre de junio, ACS mantenía una posición de deuda neta de 2.976 millones. Esta cifra no incluye la caja del negocio industrial (859 millones) fruto del acuerdo de venta a Vinci.