En un contexto global de creciente preocupación por el cambio climático, Aigües de Barcelona, la empresa responsable del ciclo integral del agua en el área metropolitana de Barcelona, ha dado un paso firme en la lucha contra la crisis climática.

Con un ambicioso plan para reducir su impacto ambiental, la compañía ha establecido como meta alcanzar la neutralidad climática para el año 2050, un desafío que refleja su compromiso con la sostenibilidad y la preservación de uno de los recursos más preciados: el agua.

El desafío del cambio climático

El cambio climático está teniendo un impacto profundo en la gestión del agua, y la situación en Catalunya es un claro ejemplo de los retos a los que se enfrenta el sector. Desde el año 2000, las sequías han aumentado un 29% en todo el mundo, y Catalunya ha experimentado cinco períodos de sequía en las últimas dos décadas, lo que ha puesto bajo presión los sistemas de abastecimiento de agua.

Las estimaciones no son alentadoras: para el año 2050, el litoral catalán podría sufrir una disminución del 22% en la cantidad de agua disponible, lo que plantea la urgente necesidad de estrategias innovadoras y sostenibles para garantizar el acceso al agua.

Las iniciativas de Aigües de Barcelona

En respuesta a estos desafíos, Aigües de Barcelona ha implementado una serie de medidas destinadas a reducir su huella ambiental y adaptarse a las nuevas condiciones climáticas.

Desde 2015, la empresa ha logrado reducir su huella de carbono en casi un 46%, un logro considerable que refleja su enfoque en la sostenibilidad. Además, Aigües de Barcelona ha obtenido reconocimiento internacional al convertirse en la primera empresa del sector del agua en recibir la aprobación de la Science Based Target initiative (SBTi) por sus objetivos de cero emisiones netas, un estándar que confirma que sus metas están alineadas con la ciencia climática más avanzada.

Asegurar el futuro del agua

Aigües de Barcelona no solo se ha centrado en la reducción de emisiones, sino que también está tomando medidas para garantizar un suministro de agua estable en un futuro cada vez más incierto. Una de sus principales iniciativas es el desarrollo de un plan director metropolitano de agua regenerada, que está siendo elaborado en colaboración con más de 160 actores externos. Este plan busca aprovechar de manera eficiente el agua regenerada, una estrategia clave para enfrentar la escasez de recursos hídricos.

La compañía también ha invertido en infraestructuras que optimizan el uso de los recursos hídricos disponibles, con un enfoque en la innovación tecnológica y la eficiencia. Además, Aigües de Barcelona está promoviendo activamente el uso responsable del agua entre la población, destacando la importancia de la conservación y el consumo consciente en un escenario de cambio climático.

El agua regenerada es una solución sostenible y circular para afrontar la escasez hídrica / Foto: Aigües de Barcelona

De fangos residuales a combustibles, abonos y energía

Aigües de Barcelona está desarrollando una hoja de ruta para transformar la gestión de lodos en sus plantas de tratamiento de aguas residuales (EDARs). Esta iniciativa busca reducir las emisiones generadas durante el tratamiento mediante técnicas innovadoras como la pirólisis y la gasificación, que permiten producir biocombustibles y bioproductos valorizados como el biochar, útil para mejorar el suelo agrícola y capturar carbono.

Además, la compañía está construyendo un sistema de digestión anaeróbica en la depuradora de Montcada i Reixac, que producirá hasta 3,2 millones de metros cúbicos de biogás, reduciendo el volumen de lodos y proporcionando un 60% de autosuficiencia energética en la planta, evitando la emisión de 7.600 toneladas de CO₂.

Agua regenerada, una solución sostenible

Con el objetivo de garantizar el abastecimiento de agua en el área metropolitana, Aigües de Barcelona impulsa el uso de agua regenerada. En 2023, la compañía regeneró 57,9 hectómetros cúbicos de agua para diversos usos, como la producción de agua potable, la agricultura, la industria y las ciudades.

Este proceso tiene una huella de carbono significativamente menor que la desalación y un impacto energético tres veces inferior. Actualmente, Aigües de Barcelona envía un caudal de 1.500 litros por segundo de agua regenerada desde la Estación Regeneradora de Agua del Baix Llobregat, que es tratada nuevamente antes de su distribución a los hogares.

Un modelo de sostenibilidad

En un momento en que el agua se está convirtiendo en un recurso cada vez más escaso, Aigües de Barcelona está demostrando que es posible combinar la gestión eficiente del agua con la lucha contra el cambio climático.

Su enfoque no solo es crucial para Catalunya, sino que también sienta un precedente para el sector del agua a nivel mundial. Con su compromiso con la sostenibilidad y su apuesta por la innovación, Aigües de Barcelona se posiciona como un referente en la búsqueda de soluciones para mitigar los efectos del cambio climático y asegurar un futuro más sostenible para las próximas generaciones.