Ir conduciendo en el coche y sentir la necesidad de responder a un whatsapp con urgencia por ser un tema importante, para avisar que estamos a punto de llegar o simplemente porque queremos decir algo a alguien en ese momento es algo común. Sin embargo, hace falta solo esa pequeña distracción para que todo cambie. Y es que el 35% de las muertes en carretera ocurren a raíz de las distracciones con el móvil, 390 personas el pasado año. “Contestar un whatsapp puede suponer 20 segundos. Pero 20 segundos conduciendo a 120 kilómetros por hora son 12 piscinas olímpicas. Y no nadarías 12 piscinas olímpicas con los ojos cerrados”, explica Kevin Arjona, director ejecutivo de la startup SecurDrive.

Fue en 2019 cuando el emprendedor se unió junto con su socio, Diego González, para tratar de poner punto y final a esta situación a través de su startup. Entonces nació MyFreeHands, la aplicación que entiende cualquier frase al volante —disponible ya en castellano, catalán, francés e italiano— y que aspira a convertirse en “la Alexa del coche”, según explican sus creadores.

Mejora en la transcripción de los mensajes 

Arjona creó su empresa de márketing digital con una inversión de 5.000 euros, después de haber sido autodidacta desde que era prácticamente un adolescente. A día de hoy, la compañía de 47 trabajadores es matriz de otras siete empresas (entre las cuales se encuentra SecurDrive) y facturó 3 millones de euros en el año 2019. La previsión es alcanzar los 6 para este año.

producto3
Un usuario utilizando MyFreeHands en su coche. Foto: MyFreeHands

A todos nos ha pasado que dictas una frase a un altavoz inteligente o a algún dispositivo para que te entienda y el resultado final es algo realmente diferente. Sin embargo, a la hora de emitir una respuesta y mandarla a algún contacto, MyFreeHands es capaz de elaborar frases complejas gracias a la colaboración con Google, que posee uno de los sistemas más avanzados en esta área. “El sistema sortea los ruidos de la carretera, puede leer cualquier aplicación y corta todas las reproducciones que haya en el momento de recibir o emitir un mensaje”, especifica el empresario.

Los negocios digitales, al margen de la crisis

La app, además, muta constantemente añadiendo nuevas prestaciones, idiomas y compatibilidades. De cara al próximo año, se espera añadir un detector de radares y un avisador del limite de velocidad complementarios. Sobre los idiomas, el equipo se encuentra desarrollando el alemán y el holandés, junto con otros idiomas de la zona euro. “Un usuario catalán puede utilizarlo y el sistema lo entenderá perfectamente. Solo necesita que el idioma de su teléfono esté configurado como tal”, subraya Arjona.

Uno de sus principales planes de expansión viene de la mano de las aseguradoras de vehículos, así como de los VTC. “Nuestro objetivo es que acabe siendo un producto de inclusión para ayudar a las aseguradoras a rebajar las muertes en carretera”, concreta. El grupo se encuentra —según explica— en negociaciones con tres compañías del sector de más de 1,5 millones de pólizas. Entre sus potenciales clientes, también se encuentran empresas como Correos y fundaciones, como la ONCE.

Aunque mirar a varios años vista a día de hoy puede suponer una odisea a causa de los daños del coronavirus en la mayoría de sectores económicos, Kevin Arjona mira con optimismo el futuro. “No hemos visto afectación en nuestros negocios a causa de la coyuntura económica porque, al ser digitales, no paran de crecer. No nos podemos quejar y prevemos que sigan en auge en los próximos años”, augura el directivo.

 

Imagen principal: Un hombre al volante de un coche. Foto: Pixabay