El Banco Central Europeo (BCE) rompe la hucha. Hoy ha decidido responder a la crisis causada por el coronavirus ampliando su programa de compra de activos contra la pandemia (PEPP) en 600.000 millones de euros, llevando así la totalidad del programa hasta 1,35 billones de euros. Además, también ha decidido alargar el programa hasta finales de junio del 2021.

Así lo ha comunicado el instituto emisor después de la reunión de hoy y en que ha decidido mantener sin cambios los tipos de interés principal en su nivel actual, al 0%.

El organismo presidido por Christine Lagarde ha asegurado que todas las compras realizadas bajo este programa se harán "de manera flexible", por lo que el BCE podrá comprar los activos que considere y de las jurisdicciones que vea necesario. El Consejo de Gobierno ha subrayado que estas compras durarán tanto de tiempo como sea necesario para reforzar "el impacto acomodaticio" de sus tipos de interés y que acabarán poco después de que el BCE empiece a elevarlos, cosa que, como ya era de esperar, de momento ha decidido no tocar.

Sin cambios en los tipos de interés

Tal como se esperaba, el BCE ha mantenido sin cambios los tipos de interés de referencia para sus operaciones de refinanciación en el 0%, mientras que la tasa de facilidad de depósito continuará en el -0,50% y la de facilidad de préstamo en el 0,25%.

Además, según ha explicado el instituto emisor, los tipos se mantendrán en su nivel actual hasta que el BCE considere que el pronóstico de inflación "converge robustamente a un nivel lo bastante cerca, pero por debajo, del 2%".