El Banco Central Europeo (BCE) ha decidido este jueves mantener los tipos de interés y el ritmo de compra de deuda para afrontar la crisis provocada por la pandemia. Concretamente, la institución comandada por, Christine Lagarde, mantiene el tipo de interés de las operaciones principales de financiación al 0%, según ha informado en un comunicado. Además, deja inalterada la facilidad marginal de crédito, el tipo de interés al que presta a los bancos a un día, en el 0,25%, y la facilidad de depósito, por la que penaliza el exceso de reservas a un día, al -0,50%.
En septiembre pasado el Consejo de Gobierno decidió reducir en el cuarto trimestre el ritmo de las compras semanales de deuda de emergencia frente a la pandemia, respecto a los trimestres anteriores. "El Consejo de Gobierno sigue considerando que pueden mantenerse unas condiciones de financiación favorables con un ritmo de compras netas de activos en el marco del programa de compras de emergencia frente a la pandemia ligeramente inferior al del segundo y tercer trimestre de este año", según el comunicado.
Por lo tanto, sabemos que la entidad va a comprar deuda por la pandemia por un total de 1,850 billones de euros hasta el final de marzo de 2022, compra ahora alrededor de 70.000 millones de euros al mes, a través de este programa de estímulos monetarios. Además, adquiere bonos por valor de 20.000 millones de euros al mes mediante otro programa de expansión cuantitativa. Las compras netas de este programa de compras de activos continuarán a un ritmo mensual de 20.000 millones de euros y finalizarán poco antes de que comience a subir los tipos de interés.
El precio de la energía puede reducir el poder adquisitivo
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, ha advertido este jueves de que el encarecimiento de la energía "puede reducir el poder adquisitivo" de los ciudadanos de la zona del euro los próximos meses. Tras la reunión del Consejo de Gobierno, Lagarde ha dicho que la inflación va a subir los próximos meses, pero que volverá a caer a lo largo del próximo año. La presidenta del BCE ha explicado que las deliberaciones del Consejo de Gobierno se han centrado hoy en la inflación. De hecho, el BCE prevé que la inflación se va a moderar más despacio de lo que pensaba, pero lo hará el próximo año. "Aunque la inflación va a tardar más tiempo en caer de lo esperado previamente, esperamos que estos factores disminuyan a lo largo del próximo año", ha asegurado Lagarde.
El BCE pronostica que la inflación va a seguir situándose a medio plazo por debajo de su objetivo del 2% y también prevé que la producción económica de la zona del euro supere los niveles anteriores a la pandemia a finales de este año. El impacto de la pandemia en la economía "se ha debilitado visiblemente", en la medida en que se han levantado las restricciones como resultado del éxito de las medidas sanitarias y que un gran número de la población esté vacunada, afirma Lagarde. "Esto apoya el gasto en consumo, especialmente en entretenimiento, cenas, viajes y transporte", ha añadido.
La presidenta del BCE ha destacado que la economía de los países que comparten el euro "continúa recuperándose con fuerza, aunque a un ritmo más moderado". El Consejo de Gobierno también observa que los tipos de interés en el mercado han subido desde la reunión de septiembre, pero considera que las condiciones de financiación siguen siendo favorables para las empresas, los hogares y el sector público.
Los tipos seguirán igual por un tiempo
El BCE espera que sus tipos de interés continúen en los niveles actuales, o en niveles inferiores, hasta que observe que la inflación se sitúa en el 2% a medio plazo. La inflación subyacente, que descuenta los elementos más volátiles como los alimentos frescos y la energía, también debe subir de forma estable. "Ello también podría implicar un período transitorio en el que la inflación sea moderadamente superior al objetivo", dice el BCE.
El BCE continuará proporcionando abundante liquidez a través de sus operaciones de financiación. En particular, añade, la tercera serie de operaciones de financiación a plazo más largo con objetivo específico sigue siendo una atractiva fuente de financiación para los bancos.