El Brexit ha provocado un shock en EE.UU. donde los diarios han catalogado la victoria del Brexit como el peor acontecimiento desde la crisis de los misiles, que en los años 60 estuvo a punto de enfrentar en una guerra atómica a los Estados Unidos y la Unión Soviética a causa de Cuba. Wall Street ha abierto con fuertes caídas tanto en el Dow Jones como en el S&P 500. Pero entre los perdedores, el Ibex ha estado entre el grupo de cabeza con unas pérdidas del 12%.
La fuerte presencia y peso de la banca en el Ibex ha provocado un descenso similar al que ha azotado a la Bolsa de Londres. El Santander, Sabadell y Bankia han sido fuertemente castigados, aunque el mayor descenso lo ha sufrido IAG, al combinar la antigua Iberia y British Airways.
No sólo las bolsas, todos los mercados han caído. El petróleo Brent ha perdido un 4,59%, cotizando a 49,24 dólares, mientras el Texas descendía un 4,29%. Las materias primas han seguido la tendencia bajista mientras el oro se ha revalorizado un 4,47%, hasta 1.319 dólares la onza.
La libra esterlina se ha depreciado un 10% al tiempo que el euro caía a 1,1015 dólares. Y aquí ya han comenzado las alarmas al anunciar la Reserva Federal que vigilará la volatilidad en el mercado de divisas. Las guerras de divisas comienzan con desórdenes graves entre países o bloques, como es el caso del Brexit, y donde las vías tradicionales de crecimiento quedan interrumpidas.
La Cámara de Comercio española ha señalado que el proyecto común europeo está en "evidente riesgo". Sin ir más lejos, el descenso de la libra esterlina puede afectar gravemente al número de turistas británicos que podrían venir este verano. Y el turismo procedente del Reino Unido representa una parte significativa del PIB español, de manera que una caída del 10 por ciento de la cifra de turistas británicos ya repercutiría en la economía española con la bajada de un 0,13 % del PIB. Las inversiones inmobiliarias británicas son igualmente importantes.
Para Gran Bretaña, la incertidumbre que se cierne sobre sus relaciones comerciales con Europa son graves porque es su primer mercado importador. Y la City puede quedar relegada como gran plaza financiera mundial. Los bancos JP Morgan y Morgan Stanley ya han anunciado que reducirán sus divisiones de inversión en Londres. Frankfurt y París se van a poner en marcha.
Todo el mundo se da cuenta que nos hemos metido en un embrollo. En China, donde los beneficios de las empresas públicas han caído un 9%, el banco central ha puesto en marcha un plan de contingencia. Contingencia: ese es el estado en que nos encontramos.