La Comisión Europea propone a los estados destinar "al menos" 22.000 millones de euros de fondo europeos a empleo para jóvenes para evitar "una nueva crisis" en empleo juvenil como consecuencia del impacto del coronavirus. En su recomendación para favorecer el empleo entre los jóvenes, el ejecutivo europeo plantea ampliar el programa Garantía Juvenil, que tiene el objetivo de facilitar la formación y el empleo entre los jóvenes, hasta los 29 años.

La mayoría de estados ya habían ampliado la franja de edad de las personas que se podían acoger al programa, pero la edad oficial aprobada el 2013 por la Unión Europea seguía siendo 25 años. En Catalunya, por ejemplo, la Garantía Juvenil ya era hasta menores de 30 años.

El documento propuesto por la Comisión también alerta de la desprotección social de los jóvenes que todavía no han encontrado un primer trabajo o que "a menudo trabajan en economía informal o no estándar". También avisa de que los sectores en que generalmente trabajan más jóvenes, por ejemplo el turismo, son los más afectados por la pandemia.

Con un paro juvenil del 15,4% en abril –siete puntos superior al general-, la propuesta de la Comisión quiere evitar que la cifra se suba a niveles como los registrados durante los años posteriores a la crisis financiera. El pico fue en el 2013, año en que el paro juvenil llegó al 24,4%. Estados como Grecia y España siguen registrando cifras parecidas a esta en paro juvenil en la actualidad.

Con respecto al "refuerzo" del programa de Garantía Juvenil, el ejecutivo europeo también propone hacerlo "más inclusivo", especialmente con respecto a colectivos vulnerables, y "reforzar la dimensión de género". También propone "vincular" las formaciones a las necesidades de las empresas y potenciar las que hacen referencia a la transición verde y digital.

De los "al menos" 22.000 millones de euros de fondo europeos que la Comisión pide a los estados que destinen a empleo juvenil, el ejecutivo europeo plantea que los fondos vayan a parar a ayudas y préstamos a jóvenes para impulsar sus negocios, en pymes para que contraten aprendices, a formar jóvenes en habilidades que pide el mercado laboral o a incrementar la capacidad de los servicios públicos de empleo.

Nueva agenda europea de capacidades

Por otra parte, la Comisión Europea ha presentado la nueva Agenda Europa de Capacidades en la cual se establecen "ambiciosos" objetivos cuantitativos para mejorar las habilidades actuales de la población europea y fomentar el reciclaje profesional durante un horizonte de cinco años.

Estos objetivos están basados en los indicadores que ya existen en el caso de la transición digital, pero Bruselas tendrá que desarrollar nuevos indicadores que sirvan para supervisar los avances conseguidos en el ámbito de la transición climática.

Entre los indicadores que ya existen, las autoridades europeas pretenden aumentar la participación de adultos de entre 25 y 64 años en actividades de formación durante un periodo de 12 meses del 38% de 2016 al 50% en el 2025. También quieren elevar al 30% la participación dentro de adultos dentro de la misma franja de edad con baja calificación en programas de formación.

Otro de los objetivos que marca la Agenda es incrementar el porcentaje de adultos con una actividad de formación reciente del 11% registrado el año pasado al 20% dentro de cinco años. Finalmente, la Comisión Europea se marca el objetivo de elevar del 56% al 70% el porcentaje de adultos de entre 16 y 74 años con capacidades digitales básicas.

Según las estimaciones de Bruselas, para conseguir estos objetivos se tendrían que realizar 540 millones de actividades de formación en los próximos cinco años, 60 millones destinadas a adultos poco cualificados. Además, el número de europeos adultos con capacidades digitales básicas tendría que ascender a 230 millones.