La economía española se ralentitza, aunque seguirá creciendo por encima del 2% al menos durante el 2019. La Comisión Europea ha rebajado una décima su previsión de crecimiento económico para España tanto este año como el siguiente (en el 2,1% y 1,9%, respectivamente), principalmente por la moderación registrada en el consumo privado, a la vez que se espera que la creación de empleo se modere en parte por la subida del salario mínimo interprofesional.
Bruselas ha presentado este jueves sus 'previsiones de invierno', en que también estima que la economía española se expandió un 2,5% en el 2018, el mayor incremento entre las grandes economías europeas y por encima de la media de la eurozona (1,9%), pero una décima menos de lo que el ejecutivo comunitario calculaba en noviembre y cinco décimas menos que el 2017.
El Ejecutivo explica que en los próximos meses continuará la desaceleración de la economía a medida que el ciclo "madura", pero también advierte que España se enfrenta a riesgos relacionados principalmente con un entorno global "más débil de lo que se esperaba" y una incertidumbre "creciendo" tanto a nivel interno como externo.
Según la Comisión, el principal factor que explica el menor crecimiento económico es la desaceleración del consumo privado, que crecerá menos que la renta disponible. De hecho, la tasa de ahorro de los hogares "rebotará" en 2019 después de haber registrado un mínimo histórico el año pasado y seguirá creciendo "levemente" en el 2020.
Por otra parte, la Comisión Europea cree que la "creación de empleo se debilitará" en los próximos meses, a causa "del esperado impacto amortiguador del incremento en el salario mínimo". Sin embargo, añade que el crecimiento de la tasa de empleo seguirá reduciendo el nivel de paro a lo largo de todo el horizonte temporal.
La contribución del sector exterior seguirá siendo "negativa" pero mejorará este año y pasará a ser neutral en 2020. En este sentido, Bruselas piensa que las exportaciones españolas se acelerarán este año y el próximo a pesar de las tensiones comerciales globales. Las importaciones, según el Ejecutivo comunitario, ampliarán su moderación en línea con la demanda final.