Las vacaciones de verano empiezan oficialmente ahora que ya es agosto, pero la Cambra de Comerç de Barcelona no se detiene. El equipo liderado por Joan Canadell y Mònica Roca, que lleva el timón de la Cambra desde junio, seguirá trabajando durante agosto para sacar adelante varias líneas estratégicas y "prioritarias", ya anunciadas en su programa electoral, y ponen como prioridad sacar adelante el sistema de consultas al empresariado, con la idea de que se empiecen a hacer a finales de septiembre.
Aunque han sido dos meses movidos por la nueva Cámara, todavía han quedado cosas pendientes. Como deberes de verano, la institución tiene que acabar de ligar el sistema electrónico a fin de que se puedan hacer estas consultas, y también actualizar el censo de la Cámara de manera que todo el empresariado al cual representa pueda participar. La idea de la candidatura Eines de País es consultar a los empresarios sobre "cuestiones de país", y ponen como ejemplo preguntar sobre "la soberanía fiscal, la posibilidad de considerar al Rey persona 'non grata' o la voluntad del empresariado que la Cámara sea activa en el camino hacia la independencia de Catalunya".
Con todo, el relevo de la Cámara de Valls a la Cámara de Canadell todavía ha dejado algunos temas pendientes más allá de las nuevas iniciativas. El giro de 180 grados en el pleno de la institución comporta también un giro radical en todos los cargos de representación que tiene la Cámara, como la presidencia de Turismo de Barcelona o el Centro de Diseño de Barcelona (CDB), entre muchos otros. Hasta el momento, el cargo de presidente de Turismo lo ha asumido el presidente cameral, Joan Canadell, pero su voluntad es la de "encontrar a la persona adecuada para delegarle".
La 'silla de plata' vacía
Una de las 14 sillas ocupadas por las empresas de mayor aportación a la Cambra de Comerç quedó vacante porque tal como adelantó ElNacional.cat, la empresa Magma Diseño, liderada por Toni Clariana, no pagó los 75.000 euros que se tenían que abonar para el primer año y finalmente decidió dejar la silla, a pesar de haber un compromiso formal con la institución. Respecto de este hecho, la nueva Cámara está pendiente de decidir qué acciones legales emprende contra Magma, unos deberes que quedan pendientes cuando se reanude el curso el mes de septiembre.
Con todo, de momento, la Cámara de Canadell decidió en el primer pleno de la nueva institución abrir un periodo -abierto hasta el próximo 20 de septiembre- para que las empresas que lo deseen presenten su candidatura para ocupar la silla de Magma. Recordamos que se trata de asumir un compromiso con la institución de aportar un mínimo de 75.000 euros el año, durante cuatro años -el tiempo que dura la candidatura. En palabras de Canadell, su idea es que la empresa que tome este rol sea una cooperativa o una asociación, para dar voz a más empresarios, aunque al tratarse de una subasta pública se puede presentar quien quiera.
Al mismo tiempo, los integrantes de Eines de País han reiterado varias veces que su voluntad es "dejar de depender de la financiación de unas empresas que, además, tienen voz y voto en las decisiones del pleno". Para poder prescindir, sin embargo, previamente habría que encontrar otras maneras de financiar la Cámara, algo que según el equipo cameral "ya se están valorando algunas opciones, y se seguirá estudiando en septiembre". Además, uno de los pasos "imprescindibles" para estudiar la financiación de la institución es sacar adelante una auditoría de los últimos años, cosa que Canadell anunció que haría en una de las últimas ruedas de prensa.
Las trabas del establishment
Dos de los candidatos a las elecciones de la Cámara barcelonesa no encajaron bien su derrota e intentaron parar el pleno de investidura de Canadell con querellas, recursos de alzada y también la personificación de un notario el mismo día del pleno constituyente. No tuvo efecto en su momento y Canadell se pudo confirmar como presidente cameral, pero los trámites judiciales todavía no están resueltos.
Se trata del financiero Carles Tusquets y el abogado Ramon Masià, que junto con 20 empresarios pusieron en marcha un intento de "hacer un 155" contra las elecciones camerals, con la intención fallida de suspender el pleno del día 17 de junio, y con la petición que se anulen los resultados y se hagan nuevas elecciones o bien que se haga un nuevo recuento con las vocalías afectadas por los votos desestimados por la Junta Electoral, "que harían mover hasta 8 vocalías", aseguran. Además, hay en marcha un recurso de protección de los derechos fundamentales; un recurso de alzada contra el acuerdo de la JEC del 13 de mayo (fecha del recuento definitivo) y por lo tanto contra la consellera de Empresa, Àngels Chacón, que es el órgano tutelar y que pide medidas cautelares; y un requerimiento en el Consejo General de Cámaras de Catalunya principalmente contra la empresa encargada del voto electrónico, Scytl.
En el momento de la noticia, se encendieron todas las alarmas, pero hasta ahora no ha habido más novedades. Fuentes de la Cámara y de la Generalitat dudan del recorrido que estas acciones puedan tener, "al menos no a corto plazo, ya que estas cosas acostumbran a tardar años...". Con todo, es un tema que también queda pendiente de cara en septiembre, para empezar a poner claroscuros a las estrategias legales que amenazan a la Cámara de Canadell.