Los presidentes de las trece Cambres de Catalunya han reclamado al Parlamento que apruebe la proposición de ley que las regula en lectura única antes de que se acabe la legislatura en un acto unitario en la Llotja de Mar. "Las cámaras tenemos mucho a hacer para ayudar a superar la crisis. Si no aprobáis esta ley, pararéis las cámaras. Insistimos una vez más: partidos políticos, no paráis las cámaras", ha clamado el presidente del Consejo de Cámaras de Catalunya y del ente cameral barcelonés, Joan Canadell.
Las entidades han cargado contra las patronales a quien acusan de dar argumentos que no son reales y de tener miedo de perder bastante en la representatividad empresarial. "Hay patronales que hace 25 años que no escogen a un presidente", ha lanzado Canadell.
El secretario general del Consejo de Cámaras de Catalunya, Eduard Borràs, ha defendido que las acusaciones de inconstitucionalidad de la norma que esgrimen las organizaciones empresariales y los sindicatos no son válidas. Según ha explicado, el Tribunal Constitucional ya ha dejado claro que las cámaras pueden representar a los empresarios en órganos institucionales y no sólo de manera "puramente administrativa". Además, también ha afirmado que el procedimiento de tramitación en lectura única es legal siempre que se respete el tiempo necesario para presentar enmiendas.
"Es triste"
Los presidentes de las entidades han admitido que esta fórmula de tramitación no es la más idónea pero es la única que permite salvar el proyecto, que está pendiente de aprobar desde el 2015, cuando expiraba el plazo para que las comunidades autónomas adaptaran la normativa cameral básica estatal en su territorio. "Sólo pretendemos hacer aquello que ya han hecho casi todas las comunidades autónomas. Es triste", ha dicho Canadell.
En esta regulación, se incluye una aportación de fondos públicos que quedaría recogida en los presupuestos catalanes. Ahora mismo, las cámaras no reciben recursos públicos que no sean finalistas, es decir, dedicados a proyectos concretos; una situación que se alarga desde que se eliminó el recurso cameral permanente hace 10 años.
Para poder aprobarla, la proposición de ley tendría que entrar en el Parlamento en el pleno del 2 y 3 de diciembre, dar luz verde para que se tramite en lectura única y se empiecen a recoger enmiendas, si hay. La votación definitiva se tendría que producir en el pleno del 15, 16 y 17 de diciembre."Es la última oportunidad que tenemos. Después de 5 años de retrasos queremos cerrar ya esta parte de nuestra tarea que desgasta mucho", ha dicho el presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona.