El presidente de la Cambra de Comerç, Joan Canadell, ha aseverado hoy en rueda de prensa que los disturbios ocasionados la semana pasada por las protestas en respuesta a la sentencia del procés "ha tenido una afectación mínima en la economía", si bien "ha estado sólo una semana" y "tendríamos que ver cómo evoluciona si la situación se cronifica en el tiempo". Con todo, Canadell ha tildado "irresponsable" al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, a quién ha hecho "el último culpable de la situación que se vive en Catalunya por su falta de predisposición a dialogar" con Torra.
En este sentido, el presidente de la Cámara ha aseverado que "lo que puede ser es que haya tenido un impacto en la imagen del país, seguramente, y que ha habido cancelaciones en el sector del turismo, pero no son números exagerados y tendremos que ver cómo evoluciona todo". Al mismo tiempo, ha aceptado una afectación "alta" principalmente en los comercios del centro de Barcelona, y ha culpado al Estado del problema. "Una cosa tan fácil como es sentarse a negociar, si eso puede parar que los comercios y la economía salga afectada por los disturbios, es irresponsable no hacerlo porque eso está pasando por esta falta de diálogo por parte de Pedro Sánchez".
Con respecto al acto que ha convocado Foment del Treball con Pimec y el empresariado para dar "un mensaje unitario" de cara la situación actual, Canadell ha aseverado que ha visto el manifiesto previamente y que está de acuerdo en la mayoría de puntos pero que echa de menos ciertas cosas. "No se puede judicializar la política y agradecemos que Pimec y Fomento estén de acuerdo con nosotros en este sentido, y también que se exija el diálogo y la negociación". Por otra parte, "hay algunos puntos en que no estamos de acuerdo, y es que se hable de violencia por parte de los manifestantes y obviar la violencia gratuita por parte de los cuerpos de seguridad, que ha existido".
Finalmente, Canadell ha defendido que la reacción de la sociedad civil a la sentencia del Tribunal Supremo (TS) para el 1-0 fue la protesta en el aeropuerto del Prat y la huelga y lo ha desvinculado de los disturbios a partir del martes. En el caso del aeropuerto, ha puntualizado que la gente se manifestaba "pacíficamente" y que cuando hubo cargas policiales llegó la "violencia", a pesar de reconocer que finalmente hubo "por las dos partes".