Catalunya es la segunda comunidad del Estado con más caída de la actividad turística, de un 74,8% anual, según datos de Exceltur. Baleares se sitúa en primera posición, con un descenso del 82,6%, y Madrid ocupa el tercer lugar, con una bajada del 72%.
La asociación ha revisado a la baja la estimación del PIB turístico al cierre de 2020 y ha estimado una caída del 69,6%, un descenso de actividad de 106.159 millones de euros con respecto al año pasado. Esta cifra supone un 67% del total de la caída de la economía estimada por el Banco de España para el conjunto del PIB en este año. En caso de confirmarse esta previsión, los 46.431 millones de euros de actividad turística del 2020 se situarían en los mismos niveles que el año 1995.
El problema va más allá del turismo
Exceltur ha advertido que esta situación supone un problema que va más allá de la actividad turística, ya que también tiene efectos sobre las ventas de empresas proveedoras, el desempleo, la caída de los ingresos fiscales, la cobertura del servicio de la deuda externa o la "cohesión territorial".
Los rebrotes de la pandemia también han provocado un retraso de las expectativas empresariales sobre la recuperación del sector. Un 10,2% de los empresarios esperan llegar a los niveles previos de la pandemia en el 2021; un 46,1%, en el 2022, y un 43,7% en años posteriores, según la encuesta de confianza empresarial de la entidad. De hecho, estas previsiones y las crecientes caídas de la actividad turística anticipan el inicio de un proceso de "destrucción masiva de empleos", que puede afectar en 750.000 puestos de trabajo en el 2020.
Impacto en verano
Este verano, la actividad turística ha experimentado una "caída histórica" de 39.903 millones de euros en el Estado, un 69,2% menos con respecto al mismo periodo del año pasado, por las restricciones de movilidad, las cuarentenas, el cierre de las fronteras, la pérdida de confianza y el deterioro económico.
Con respecto al empleo, hay 595.000 puestos de trabajo afectados por la pandemia hasta septiembre. Esta cifra se debe a la reducción de afiliados y al elevado número de personas en ERTE. La suma de ambos datos supone una caída del 28,5% con respecto a septiembre del año pasado.
La actividad turística de este verano ha sido afectada por una demanda extranjera "inexistente", con caídas superiores al 80% tanto en el número de pernoctaciones como en el gasto, y una demanda española a niveles del 30% en comparación con el año pasado.
Barcelona, descenso del 93,7%
Barcelona ha experimentado la caída más pronunciada, con un descenso del 93,7%. En esta le ha seguido Madrid, con un 88,2%, y destinos insulares como Mallorca (-85%) o Tenerife (-82,8%). La costa del norte de España y las zonas del litoral, como la Costa Verde de Asturias (-7,6%) o Cádiz (-42%) han registrado las caídas a más moderadas.
En el tercer trimestre, los hoteles han sufrido una caída de las ventas del 70,8%; las agencias de viaje, del 82,2%; las empresas de transporte, del 67,4%; el alquiler de coches, del 62,2%, y las empresas de ocio, del 65,8%. Estas bajadas se sitúan muy por encima de las registradas en otros sectores como la industria o los servicios, con descensos del 11,2% y el 13,8%, respectivamente.
Para el cuarto trimestre, Exceltur prevé una caída de las ventas de las empresas turísticas de hasta el 77,6%. En el caso de las agencias de viajes, el descenso se eleva hasta el 82,7%; el 82,5% en caso de hoteles tanto urbanos como vacacionales; el 72,5% en las de transporte; 70,5% en las de ocio, y 60,1% en coches de alquiler.
Reclamación de medidas concretas
Ante esta situación, la asociación ha reclamado "con más urgencia" la concreción de medidas y la dotación presupuestaria para ayudas directas para garantizar la supervivencia de las empresas del sector. Asimismo, ha pedido la implementación de un "gran plan de rescate" que incluya medidas para controlar la expansión del virus, potenciar un clima de confianza y generar demanda externa cuando sea posible, entre otros.
En concreto, ha reclamado el alargamiento de los ERTE hasta finales de 2021 e impulsar medidas sustitutivas de los préstamos ICO para hacer frente a la falta de ingresos. También han propuesto la bajada del IVA al 5% hasta junio de 2021, el lanzamiento de bonos para incentivar la demanda, eliminar la cláusula de seis meses de mantenimiento del empleo después de los ERTE y ampliar a dos años la moratoria de deudas hipotecarias de empresas de varios subsectores turísticos.