La recuperación económica después de la sacudida provocada por la covid Catalunya va tomando forma y todas las instituciones e indicadores auguran que el PIB catalán se recuperará por completo y llegará a los niveles de antes de la pandemia el año 2022. Según el último informe 'Situación Catalunya' del BBVA presentado este miércoles la economía catalana podría crecer como mínimo un 6,6% en el 2021 y un 7,2% en el 2022, lo cual permitiría al fin del 2022 la recuperación del nivel de PIB prepandemia.
Según el informe, la mejora económica se dará gracias al avance de la vacunación, un entorno internacional favorable, el mayor dinamismo del consumo de los hogares catalanes y el impulso que permitirán los fondos europeos Next Generation EU en el territorio. Si finalmente se cumplen todas estas previsiones De cumplirse estas previsiones, la economía catalana crearía, por término medio, unos 200.000 nuevos puestos de trabajo cada año entre el 2020 y el 2022. En todo caso, la incertidumbre es elevada, en particular con respecto al proceso de vacunación, la evolución de la pandemia y el reparto de los fondos europeos, lo cual podría condicionar la velocidad de la recuperación.
El informe, que ha sido presentado por Miguel Cardoso, economista jefe para España de BBVA Research, y José Ballester, director territorial de BBVA a Catalunya, indica que el comportamiento relativo de la economía catalana en el 2020 se explica, principalmente, por el peso mayor de los sectores de consumo social y del turismo extranjero en su economía, que contribuyó a un impacto final más acusado en la demanda catalana. Con respecto al impacto de la crisis en el mercado laboral catalán, ha sido heterogéneo desde el punto de vista territorial.
Así, según los últimos datos disponibles, la Costa Daurada y las áreas urbanas, excepto Barcelona, habrían recuperado ya el nivel precrisis de afiliación. Por el contrario, la Costa Brava, que se vio más afectada que el resto de zonas turísticas del país, y su nivel de empleo, todavía se sitúa más de 2 puntos porcentuales por debajo del nivel precrisis, una cosa parecida es lo que le pasa en Barcelona, ya que el menor dinamismo del turismo dificulta la recuperación del empleo. Con todo, en Catalunya en junio de este año, la afiliación en la Seguridad Social se habría acercado ya a 2 del nivel prepandemia.
La economía catalana podría acelerarse en el 2022
A pesar de los buenos augurios de cara a la recuperación económica, el informe también indica que esta primera mitad del año, la actividad en Catalunya se ha moderado por culpa de la evolución de la pandemia, el Brexit y el encarecimiento el petróleo. Así, el aumento de las restricciones de movilidad desde enero, por el aumento de la incidencia en Catalunya, redujeron el gasto de las familias catalanas en los primeros meses del año.
Ahora bien, esta tendencia podría cambiar durante la segunda parte del año y el crecimiento del PIB catalán podría ser mayor que el previsto hace unos meses, a causa de la rápida recuperación del consumo, después decaer el estado de alarma en mayo, concretamente destaca la aceleración del gasto en sectores de consumo social, como restauración, ocio y alojamiento, según BBVA Research.
En este sentido, el gasto con tarjeta realizada por turistas residentes en España se recupera rápidamente desde el mes de mayo. En concreto, el gasto de los catalanes superó en más de 30% el realizado en mayo del 2019, y en junio se mantuvo 20% por encima del observado en el mismo mes del 2019, por lo tanto superando los niveles de antes de la pandemia. Por el contrario, el gasto con tarjeta realizado por extranjeros, aunque habría aumentado desde mayo, todavía se encuentra en niveles muy bajos, ya que el turismo todavía no se ha recuperado.
Asimismo, las exportaciones catalanas de bienes mejoraron de forma progresiva en el primer cuatrimestre de este año, favorecidas por la mejora de la demanda externa. En todo caso, el aumento observado en el precio del petróleo podría quedar en Catalunya cerca de 0,8% al crecimiento del 2021.
De cara a los próximos trimestres, el informe indica que se prevé una aceleración de la recuperación apoyada en los progresos en la vacunación, la utilización del ahorro embalsado por las familias, la recuperación de la actividad en Europa, la aprobación del Plan de Recuperación del Gobierno con la llegada de los fondos europeos y las políticas expansivas del BCE. Todo eso, junto con una relevante capacidad de producción sin utilizar después de la fuerte caída del gasto, favorecerá el avance del consumo, del turismo y de la inversión, lo que impulsará la recuperación en Catalunya.
Factores de incertidumbre
El escenario de recuperación previsto se podría ver afectado por varios factores de elevada incertidumbre. El principal riesgo es el sanitario, por eso será clave una vacunación rápida, efectiva y masiva, en España y en Europa, que permita relajar las restricciones a la actividad económica y la movilidad. El repunte de los contagios y las nuevas restricciones en julio muestran que la incertidumbre todavía es muy elevada.
Además, está el riesgo de no abordar las reformas necesarias que permitan crear las condiciones para una recuperación vigorosa, que facilite el máximo aprovechamiento de los fondos europeos, y consistente con los objetivos medioambientales. Los fondos europeos, el impacto mayor será a partir de la segunda mitad del 2021, se repartirán en parte entre las comunidades, y el reparto final y su eficiencia podrían condicionar las previsiones de crecimiento de cada región.
La colaboración entre gobiernos, y con el sector privado, serán cruciales para una adecuada elección y ejecución de los proyectos con mayor impacto sobre el empleo y la productividad, no solo a corto sino también a largo plazo. Asimismo, la reforma de pensiones mejora la suficiencia, aunque no aborda la sostenibilidad, y por eso sus efectos dependerán de cómo se abordan los desequilibrios que persisten y la equidad intergeneracional.