La Seguridad Social no está preparada por el incremento de trabajo que supondrá el trámite del ingreso mínimo vital porque tiene un "grave déficit de personal" y es una de las plantillas "más envejecidas" de la administración estatal, ha avisado el sindicato CCOO. Según el Gobierno, la prestación tiene que beneficiar a 850.000 familias y se esperan más un millón de solicitudes.
"En el 2009 la plantilla de Seguridad Social contaba con 30.947 trabajadores, hoy se ha perdido uno de cada cinco puestos de trabajo", ha lamentado José Manuel Vera, secretario general de FSC-CCOO a la administración general del Estado, en un comunicado. Vera critica la "demora de tres años en la convocatoria y resolución de ofertas públicas" que permitirían aumentar el personal.
El sindicato denuncia que esta pérdida de empleo se traduce en una menor calidad de los servicios públicos, por el aumento de la carga de trabajo que tiene que soportar a cada empleado. "Eso siempre acaba con la privatización de los servicios públicos, lo cual pone en riesgo la garantía de los derechos de los ciudadanos, porque empiezan a desaparecer la transparencia, igualdad y objetividad, y llegan los criterios económicos", alerta Vera.
En opinión de CCOO, la gestión del Ingreso Mínimo Vital ha sido la "última carga" sobre el personal del organismo, que "no está preparado" para soportar este incremento del trabajo. "Estamos completamente convencidos de la necesidad y eficacia de esta prestación, pero no con cómo se está planteando su gestión. Se esperan más de un millón de solicitudes, expedientes que hay que recibir, gravar, reconocer, archivar e inspeccionar. El organismo no está preparado para este volumen de incremento de tareas", ha explicado Vera.
Además, CCOO denuncia que la respuesta ante esta situación haya sido la privatización del servicio público a través de la contratación de personal de TRAGSA, una empresa participada en parte por la misma Administración. El sindicato cree que la "urgencia" del momento justificaría aprobar una oferta de empleo pública extraordinaria y cubrir temporalmente estos puestos con personal interino.
"La pérdida de personal de la Seguridad Social es uno de los casos más graves que encontramos a la administración del Estado. Hace años que alertamos del envejecimiento de la plantilla, avisando el gobierno de que en 5 años se jubilan casi a 5.000 empleados públicos, un 25% de personal," insiste Vera.
Por eso, la organización sindical ve "imprescindible" trabajar en un plan de empleo que identifique las necesidades de la administración para prestar los servicios públicos con garantías para el cumplimiento de los derechos de los ciudadanos. "Superamos el 17% de pérdida de personal en los últimos 10 años, y eso supone un deterioro en la calidad de la administración pública que revierte directamente sobre la ciudadanía", avisa el sindicalista.