Recta final de la campaña electoral para la campaña a la presidencia del Cercle d'Economia. A menos de una semana para que la gran burguesía catalana vote la nueva junta electoral, los dos candidatos, Jaume Guardiola y Rosa Cañadas, han mantenido el único debate cara a cara para intentar acabar de convencer a los socios de cara al próximo 12 de julio y que ha atraído a un buen número de los 1.200 socios tanto presencialmente como por vía telemática. Durante sus intervenciones los candidatos han defendido sus posiciones y candidaturas como ya han hecho durante toda la campaña electoral. Durante el debate, los dos han tocado también los principales temas de interés de la actualidad, como el encaje de Catalunya en España, qué Barcelona buscan, la ampliación del aeropuerto o la reciente crisis energética. Ahora bien, aunque han mostrado grandes discrepancias, en un tema han sido completamente de acuerdo, en el que no irían hasta Waterloo para intercambiar sus opiniones con el presidente Carles Puigdemont.
El pistoletazo de salida al debate, que ha tenido punto con una fuerte discrepancia entre los dos candidatos, lo ha dado Rosa Cañadas volviendo a repetir que finalmente ha habido elecciones al Cercle perqué ella no comparte la línea de la junta saliente, ya que considera que se necesita un Cercle más internacional y recuperar la esencia de la entidad, todo ha llevado a la candidata a asegurar que simplemente no cree en una candidatura continuista respeta la junta anterior. En más ha añadido que uno de los motivos para hacer un cambio tan radical a la presidencia del Cercle porque el mundo es muy diferente con respecto al 2019, cuando empezó el último debate, y ha sentenciado que no ha sido capaz de ser presente en los grandes debates de la sociedad como el del aeropuerto.
Por su parte, Guardiola ha considerado que las elecciones son buenas para el Cercle y que no pasa nada porque haya más de un candidato, que es un hecho sano que permite a los candidatos la oportunidad de dialogar mucho más con los socios y aprender así lo que reclaman de la junta y del Cercle. Sobre la etiqueta de candidatura continuista que se le ha impuesto, Guardiola ha asegurado que lo acepta plenamente, pero ha remarcado que, al fin y al cabo, el Cercle de Economía es un "legado" que requiere un esfuerzo por seguir haciendo grande y actualizándolo, pero que al mismo tiempo se tiene que tratar con cariño para mantener su esencia.
Catalunya y España
Uno de los puntos estrella del debate ha sido el encaje de Catalunya en España, en el cual han discrepado. Por una parte, Guardiola ha asegurado que primero de todo se tiene que resolver el modelo territorial español y ha interpelado en el Gobierno pidiendo que las políticas públicas se tienen que hacer teniendo en cuenta todos los puntos de vista que está dentro del Estado y no tanto el punto de vista céntrico y radial de Madrid. En esta línea, el exconsejero delegado del Sabadell ha abogado para reformular el modelo de financiación del Estado y porque el conflicto entre Catalunya y España, acabe con una suerte de consulta.
Por la otra parte, Cañadas no ha puesto sobre la mesa ningún mecanismo para consultar a los catalanes, pero ha pedido que Catalunya buscar complicidades con las otras comunidades mediterráneas con el fin de cambiar el concepto de España radial. Además, ha lamentado que España no tenga un modelo de distribución de recursos claro que propician que se invierta mucho más en unas comunidades que en otros y que, por lo tanto, se tienen que imponer unas reglas claras. La presidenta de Trea capital también ha pedido un pacto fiscal que tendría que ser como el concurso vasco, pero más solidario. Por último, también ha reclamado más diálogo entre Barcelona y Madrid con el fin de llegar a acuerdo y cerrar los conflictos existentes.
Jornadas anuales
Uno de los grandes puntos de divergencia entre los dos candidatos es la reunión anual del Cercle d'Economia, que los dos últimos años se ha trasladado a Barcelona después del traslado desde Sitges. Las posiciones son diferentes, por|para una parte Guardiola aboga para mantenerlas en la capital catalana, ya que considera que le da proyección al Cercle y se ha demostrado los últimos dos años con la presencia de Mario Draghi y Ursula von der Leyen. Por el contrario, Cañadas apuesta por celebrar dos jornadas anuales, unas en Barcelona, de carácter más centrado en conferencias y las segundas en Sitges, donde se habían celebrado hasta el 2019, que estarían más encaradas a los socios de la entidad y donde se podría reflexionar mucho más sobre el mismo Cercle.