La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) no afloja ante el Gobierno español: ha decidido mantener la autorización a la OPA que Atlantia lanzó sobre Abertis. El Gobierno ya requirió a la CNMV que la revocara, con el argumento que Atlantia no había solicitado autorización al Ejecutivo para llevar a cabo la operación. Hoy era el último día que la CNMV tenía para contestar el requerimiento del Gobierno, que finalmente no ha hecho caso.
La CNMV considera que el folleto emitido por Atlantia en su oferta "reúne todos los requisitos exigidos a la legislación sobre OPAs", según ha informado en un comunicado. Eso quiere decir, por lo tanto, que Atlantia puede emitir una Oferta Pública de Adquisición sin pedir permiso al Ejecutivo. La supervisora estima también que la exigencia de autorizaciones previas en los términos previstos por el Real Decreto que regula las OPAs constituye una "excepción al principio de libro transmisibilidad de las acciones de las sociedades cotizadas".
Fomento y Energía amenazaron con tribunales
La petición de revocar la OPA la remitieron el pasado 7 de diciembre los ministerios de Fomento y el de Energía, y ya advirtieron entonces de la posibilidad de llevar a la italiana en los tribunales por la vía contenciosa-administrativa, en caso de que la CNMV no hiciera caso de la petición de anulación.
Delante de la amenaza, hace tres semanas Atlantia anunció que acataría la voluntad del gobierno de Mariano Rajoy y pediría permiso a los ministerios de Fomento y al de Energía, Turismo y Agenda Digital para comprar Abertis. Ahora, sin embargo, la CNMV explica que no había que llegar a este punto. La comisión se basa en el artículo 26.2 del Real Decreto que regula este tipo de movimientos financieros para considerar que las autorizaciones a las cuales se referían los requerimientos ministeriales no son autorizaciones "requeridas por la oferta", sino autorizaciones relativas a la transmisión indirecta de ciertos activos o contratos de los cuales es titular la empresa que preside Salvador Alemany.
Recordamos que la compañía italiana compite en esta OPA con ACS, la empresa de Florentino Pérez.