El comercio no esencial ha reivindicado este miércoles en un comunicado poder abrir los fines de semana y, para hacerlo evidente, propone abrir durante tres horas del próximo sábado a manera de manifestación. Esta es la propuesta de las patronales y asociaciones comerciales PIMEComerç Barcelona, Fundación Barcelona Comerç, Barcelona Oberta y Comertia, los cuales han "invitado" a los comerciantes a levantar las persianas el próximo sábado de 10 h a 13 h.
El comercio no esencial de Barcelona reivindica poder abrir los fines de semana: "REobrim el comercio también el fin de semana" @eixosbcn @BarcelonaOberta @PIMEComerc @ComertiaRetail #dissabtedecomerç #retail #comerç pic.twitter.com/dYamuOitJA
— Comertia (@ComertiaRetail) March 10, 2021
Las asociaciones son conscientes de que la normativa actual no permite la apertura al público del comercio no esencial los fines de semana, pero explican que sí que son permitidos los "sistemas de recogida en el local de los productos adquiridos por teléfono o vía internet, garantizando una recogida escalonada que evite las aglomeraciones."
Así pues, defienden "el artículo 9.5" para hacer la manifestación, aunque recomiendan a los establecimientos "poner una mesa o un precinto en la entrada del establecimiento, anunciando que no está permitido el acceso del público, con la finalidad de evidenciar el cumplimiento normativo."
El comercio no esencial pide a la Generalitat poder recuperar la normalidad" y han reivindicado una vez más el sector como "referente de la seguridad hacia la Covid".
Apertura de centros comerciales
Las medidas en vigor desde el 1 de marzo permiten la apertura de centros comerciales y establecimientos de más de 400m². Sin embargo, la apertura tiene que ser del lunes al viernes y con un aforo del 30% en el interior. En el caso de grandes locales comerciales, las tiendas tienen que acotar el espacio de apertura a una superficie de venta de 400 metros cuadrados.
El portavoz de la asociación de comerciantes de centros comerciales de Catalunya, Francesc Casanovas, explicó la semana pasada que una de cada cinco tiendas de centros comerciales ha tenido que cerrar a causa de las restricciones y estima que cada establecimiento ha tenido unas pérdidas medias de 12.000 euros al mes.