La fase 0 de la desescalada se ha puesto en marcha hoy con poco éxito entre los comercios que, a pesar de tener permiso para volver a subir la persiana después de dos meses enteros de no hacerlo, muchos han optado por seguir cerrados. Según cifras de PimeComerç en las cuales ha tenido acceso ElNacional.cat, en Barcelona sólo han abierto un 25% de los comercios, una cifra que aumenta hasta el 35% en el conjunto de Catalunya, pero que según su presidente, Àlex Goñi, son unos datos "irrisorios" y que "si el Gobierno no cambia o flexibiliza las normas, será complicado que muchos sobrevivan".
Según los datos de PimeComerç, actualizadas con las cifras de toda la mañana y el mediodía, el sector que mejor ha vivido la reapertura han sido las peluquerías: el 80% de ellas han podido abrir. Según Goñi, eso se debe al hecho que "son un sector que juegan con ventaja, primero porque de normal ya trabajan con cita previa y segundo porque han tenido tiempo de hacer una adecuación como es debido". También las ferreterías, por ejemplo, el 90% han podido abrir, y el comercio de la alimentación "ya iba a solas".
Al mismo tiempo, sin embargo, los más perjudicados son, "sin duda", los bares y restaurantes. Sólo han podido abrir cerca de un 2%, aquellos que ya tenían adaptada la cocina para llevar o que han encontrado la manera de hacer comida take away. De hecho, según el plan de Pedro Sánchez, los bares y restaurantes podrán abrir en la fase 1 del confinamiento sólo la terraza y al 50% de su aforo, cosa que ha sido muy criticado por parte del sector. Hoy por hoy, sin embargo, sólo pueden ofrecer su servicio para llevar.
Críticas en el Gobierno
Goñi critica que "nadie ha ayudado al comercio, ninguna administración ha echado una mano y nos lo tenemos que hacer todo solos, también las adaptaciones y las nuevas instalaciones para seguir la normativa del coronavirus, también lo tenemos que pagar todo los comerciantes". Con eso referimos a las mamparas o a las nuevas necesidades de limpieza.
"Tenemos un gobierno que cuándo ha tenido que ayudar en otros sectores no ha tenido inconvenientes", dice Goñi, "pero en cambio el pequeño comercio, que supone el 16% del PIB de Catalunya, se ve que para Madrid este 16% de Catalunya no tiene importancia", se queja el presidente de PimeComerç.