El Ibex-35 ha cerrado la sesión de este miércoles con una caída del 3,79%, la mayor bajada en un mes, lo cual ha dejado el selectivo por debajo de los 7.000 puntos, en parte en respuesta a las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) por el coronavirus y a los nuevos estímulos en China, donde se ha anunciado una rebaja de los tipos de interés.
El FMI empeoró ayer de forma significativa sus estimaciones para España como resultado del impacto del coronavirus, de manera que ahora espera que cierre 2020 con un paro del 20,8% y una caída del producto interior bruto (PIB) del 8%.
Se trata de los peores datos macro registrados por España en muchos años. De confirmarse la contracción del 8% de la economía, sería el peor dato registrado en toda la serie histórica del Instituto Nacional de Estadística, que comenzó en 1970, y, probablemente, la mayor contracción experimentada en el país desde la Guerra Civil.
El FMI ha seguido desgranando sus previsiones este miércoles, esta vez sobre deuda y déficit público. El organismo espera que España registre en 2020 su mayor déficit desde el rescate bancario, el 9,5% del PIB, y que la deuda se dispare al 113%.
Además, el mercado sigue de cerca el arranque de resultados empresariales en Estados Unidos y la publicación del Libro Beige de la Reserva Federal (Fed).
Bank of America ha reducido un 48% su beneficio hasta marzo tras aumentar un 370% las provisiones de crédito de cara a posibles impagos de crédito por la crisis del coronavirus. Lo mismo en el caso de Goldman Sachs, que ha recortado un 48,5% sus ganancias y elevado las provisiones crediticias ante el deterioro económico un 318%.
Este miércoles también se ha conocido que las ventas minoristas de Estados Unidos se hundieron un 8,7% en marzo, la mayor caída mensual de la historia.
El resto de bolsas europeas también ha finalizado la sesión en negativo, con caídas del 3,34% en Londres, del 3,76% en París, del 3,9% en Frankfurt y del 4,78% en Milán.
Asimismo, el precio del barril de calidad Brent, de referencia en Europa, descendía a 27,5 dólares, mientras que el West Texas Intermediate (WTI), referencia para Estados Unidos, cotizaba en torno a los 19,5 dólares.
Por su parte, la prima de riesgo española se encaramaba en 123 puntos básicos, con el interés exigido al bono a diez años en el 0,854%, mientras que la cotización del euro frente al dólar bajaba a 1,0910 billetes verdes.