Con la premisa de mantener todos sus puestos de trabajo, Inditex explicaba ayer durante la presentación de resultados que se ponía al servicio de la sociedad para ayudar "en todo lo que hiciera falta" en la crisis del coronavirus. En palabras de su presidente, Pablo Isla, dijo ayer que la empresa estudiaría las medidas que el Gobierno había puesto a disposición del tejido empresarial, cosa que abría la puerta a plantear un expediente de regulación temporal del empleo (ERTE) en España.
Y así ha estado. Finalmente, la empresa presentará un ERTE que podría afectar aproximadamente a 37.000 empleados, según ha adelantado Cinco Días. Desde la empresa, sin embargo, aseguran que se trata de una medida temporal y garantizan "el empleo en el futuro".
Según los sindicatos, el ERTE entrará en vigor el día 1 de abril y se aplicará sobre la gran mayoría del personal que trabaja a las tiendas de Inditex, que ya hace varios días que están todas cerradas por la declaración de estado de alarma por el coronavirus.
Al mismo tiempo, hay que tener en cuenta que el estado de alarma permite la venta en línea, lo cual implica también que un buen número de empleados siguen trabajando y dando servicio a través de este canal.
La noticia de el ERTE en Inditex llega después de que la empresa haya anunciado la donación de 300.000 mascarillas a los servicios sanitarios y anuncie la fabricación de más material como batas para los médicos.