La pandemia de la Covid-19 ha disparado el gasto de la Generalitat hasta finales de septiembre a 1.557 millones de euros, contando gastos directos, como las sanitarias y sociosanitarias, y de otros de indirectos y de inducidas por la crisis del coronavirus. Así consta en el último informe mensual de ejecución del presupuesto del Govern, actualizado a 30 de septiembre.
De los gastos estimados hasta esta fecha, 1.025,9 millones de euros corresponden a gastos directos, y otros 531,1 millones a gastos indirectos o inducidos, es decir, a gasto relacionado con medidas adoptadas para combatir los efectos de la crisis sanitaria o económica, o con prestaciones y cambios en la demanda de servicios.
Ingresos acumulados
Los ingresos acumulados hasta este mismo periodo suman 325,4 millones de euros, gracias a los fondos estatales destinados a financiar los gastos derivados de la pandemia. El Govern ha recibido el primer tramo del fondo Covid-19, así como un fondo social extraordinario y otro de sanitario. El Departament de Economia sostiene que cuando ingrese el resto de tramos previstos del fondo estatal el impacto total sobre el presupuesto será más positivo.
En julio, el vicepresident y conseller d'Economia , Pere Aragonès, cifró en 2.565 millones de euros el gasto estimado por esta pandemia durante 2020 para las finanzas de la Generalitat, y dijo que, en el capítulo de ingresos, la merma sería de unos 2.407 millones para todo el ejercicio.
Reducción de ingresos
El Govern, en su informe de ejecución mensual, admite que la pandemia de coronavirus ha reducido hasta septiembre varios tipos de ingresos. Por una parte, han caído los fondos para las políticas activas de ocupación -86 millones menos, según denunció recientemente el Departament de Treball- y también lo ha hecho la recaudación tributaria, por la caída de la actividad económica y, en menor medida, por la suspensión de las autoliquidaciones pendientes de recuperar.
En cuanto a los tributos que gestiona la Generalitat, el descenso se ha notado en impuestos importantes, como el de transmisiones patrimoniales y el de actos jurídicos documentados, los dos vinculados a la actividad inmobiliaria, y también en otros de gran importancia como el de sucesiones y donaciones. La crisis también ha afectado sustancialmente a los impuestos sobre juego y a las ventas de títulos de transporte público.
El impacto de la parálisis del mercado inmobiliario
La recaudación por transmisiones patrimoniales suma hasta el tercer trimestre del año 878,5 millones, un 23,5% menos, ya la pandemia ha paralizado las compraventas de inmuebles. Esta dinámica negativa afectó también al de actos jurídicos documentados, que aportó un 13,4% menos, si bien el aumento del tipo del 1,5 al 2% hizo que el descenso fuera más suave y la recaudación por esta vía llegara a los 364,5 millones.
Con respecto al impuesto de sucesiones y donaciones, otro impuesto propio clave para las arcas de la Generalitat, la recaudación hasta septiembre sumó 380,3 millones de euros, un 8% menos, porque "todavía no se han ingresado todas las autoliquidaciones suspendidas durante el estado de alarma y porque se están pidiendo más aplazamientos", precisa el Departament de Economia.
La crisis de la Covid-19 también incidió sobre los impuestos relacionados con el juego, que aportaron 106,3 millones, un 43,1% menos.
Ampliaciones de presupuesto
El Govern sigue haciendo ampliaciones del presupuesto de la Generalitat a medida que va recibiendo recursos del fondo estatal para la Covid. El 20 de octubre, el ejecutivo catalán acordó incrementar los presupuestos para este año en 420 millones para hacer frente a la pandemia después de que Hacienda le garantizara la financiación para un déficit equivalente al 0,2% de PIB este año. Ya en julio, el ejecutivo dio luz verde a una primera ampliación por valor de 1.230 millones de euros, todo eso para hacer frente a la emergencia derivada de la pandemia.