El dato avanzado del IPC de noviembre ya permite saber que se incrementarán las pensiones a partir del 2023. El dato de inflación de noviembre apunta, así, a una retasación de las pensiones del 8,45% el año que viene, En la primera parte de la reforma aprobada el diciembre pasado, Gobierno volvió a atar el alza de las pensiones al IPC, con respecto a la inflación media que va de diciembre del 2021 en noviembre de este año. Así pues, tal como indica el Ministerio de la Seguridad Social, los cambios marcados serían los siguientes:
- Pensión máxima: de 2.819,18 euros en 3.058.
- Pensión media: de 1.258,84 euros en 1.365.
- Pensión mínima: de 890,50 euros mensuales si se tiene un cónyuge a cargo, por lo cual subirá a 966.
- Pensión media de incapacidad permanente: de 1.034.62 euros en 1.122.
- Pensión mínima sin cónyuge a cargo: de 721,70 euros en 783.
- Pensión mínima de cónyuge no a cargo: de 685 euros en 743.
- Pensión de viudedad: de 781,16 euros en 847.
- Pensión a favor de familiares: de 641,19 euros en 695.
- Pensión de orfandad: de 439 euros en 476.
Desavenencias en el ministerio
En total, eso supone un gasto para el Estado español de 13.500 millones de euros. Y si entramos en el detalle, también hay variaciones si nos fijamos en los oficios. A modo de ejemplo, la actualización permitirá que los médicos, que en su inmensa mayoría se encuentran ubicados al máximo, lleguen a los 3.059,23 euros en el mes y rompan por primera vez la barrera de los 3.000. La pensión máxima pasará el próximo año de 39.474 euros brutos anuales a 42.829,29 como consecuencia de la aplicación del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), diseñado por el Ministerio de Seguridad Social. El cambio del modelo de retasación ya forzó el Ministerio de Hacienda a incrementar un 11,4% la partida dirigida a cubrir las pensiones en las cuentas públicas del año que viene con un importe total de 190.687 millones de euros.
Mientras el equipo del ministro José Luis Escrivá sigue trabajando a la segunda ronda de negociaciones de la reforma de las pensiones con el objetivo de dejar cerrado un acuerdo antes de que se acabe el año para presentarlo en Bruselas. La noticia de la actualización se ha producido solo unas horas después de que se haya acabado una nueva reunión de la mesa de las pensiones, donde están presentes el Ministerio de Seguridad Social, los sindicatos y la patronal. Una de las claves de la propuesta del Gobierno pasa por elevar el periodo de cálculo de la jubilación desde los 25 hasta los 30 años, aunque los trabajadores podrán escoger los 28 ejercicios en que hayan tenido una cotización mayor.
Los salarios suben
En paralelo, el salario medio mensual, en términos brutos, subió un 2,4% en el 2021, hasta 2.086,8 euros, la cifra más alta desde que empezó la serie en el 2006, según el decil de salarios que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE) a partir de los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA). Es el quinto año consecutivo en que se incrementa el salario medio después de que en el 2016 bajara por primera vez en diez años. El aumento del 2021 se ha moderado con respecto a lo que se experimentó en el 2020, cuando subió el 2,8%. Según los datos de Estadística, el 40% de los asalariados (6,64 millones) ganaron entre 1.366,5 y 2.342,2 euros brutos en el mes en el 2021, mientras que el 30% (4,98 millones de personas) obtuvo remuneraciones de al menos 2.342,2 euros mensuales y el 30% restante (4,98 millones de asalariados más) cobró un sueldo inferior a 1.366,5 euros en el mes. Estos datos son con las que se coge el Gobierno para defender la nueva fórmula de cálculo de acuerdo con el IPC y que son viables si se avanza, en paralelo, hacia un modelo de mejora de calidad de los salarios. Aunque muchos economistas avisan de que es inviable y el aumento del salario no es proporcional con el del coste de vida ni tampoco, en el corto plazo, hay una capacidad suficiente para hacer frente a las pensiones, sobre todo, de la generación del baby boom.