La multinacional Philip Morris se ha propuesto poner fin a los cigarrillos tradicionales y promueve el paso a "alternativas menos dañinas" como son las bolsitas de nicotina, el tabaco calentado o los vapeadores. En su visita a Barcelona, el director de comunicación mundial, Tommaso Di Giovanni, atiende a ELNACIONAL.CAT para explicar la transformación de la empresa y la importancia de la última decisión de la reguladora estadounidense FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos), que permitió el pasado 16 de enero la comercialización de las bolsitas de nicotina al considerar que tienen "menos cantidad de productos dañinos que los cigarrillos" y suponen un "menor riesgo de cáncer y otras serias enfermedades que los cigarros". 

 

 

Explica Di Giovanni que se trata de un paso "muy importante" porque supone "el reconocimiento basado en las pruebas presentadas de que estos productos son mejores que los cigarros". Se trata de unas bolsitas con nicotina que se ponen entre el labio y la encía y que en contacto con la saliva desprenden la nicotina. Están destinados a ayudar a los fumadores a dejarlo. Como los snus, que son parecidas, pero además de nicotina contienen tabaco, están prohibidas en la mayoría de países de Europa, salvo los nórdicos. "Pero en Suecia, el snus fue adoptado y ahora tan solo un 5% de personas fuman. Las enfermedades asociadas al tabaquismo han caído a la mitad del resto del continente", cuenta Di Giovanni, por lo que expresa su deseo de que países como España y otros europeos adopten políticas más abiertas en la transición para dejar atrás los cigarrillos de combustión. 

"Deseamos que países como España y otros de Europa adopten estos cambios porque son productos claramente mejor que los cigarrillos, sobre todo considerando el caso de Suecia", desarrolla Di Giovanni, que recuerda que el veto europeo está desde el año 1982. "Esta decisión no se revirtió pese a las tremendas evidencias, incluido epidemiológicas, de que son opciones mejores que el tabaco", completa Di Giovanni. 

Tommaso Di Giovanni. Fotografía: Montse Giralt 

Los productos sin humo representan aproximadamente el 38% de la facturación mundial de Philip Morris, cuenta Di Giovanni. "Caminamos hacia el 40%, que es un buen logro", añade. De los 36,5 millones de consumidores que han asumido productos alternativos al cigarrillo, 31 han optado por Iqos, que es el dispositivo de tabaco calentado. Al no generar combustión, produce significativamente menos elementos tóxicos para la salud, como también avaló la FDA. Con Iqos, defiende Tomasso, "la reducción de riesgos es del 95% respecto al cigarro tradicional". 

Para Philip Morris, "lo importante es que los cigarrillos pasen a ser un objeto de museo", dice Di Giovanni, y los países que han adoptado alternativas lo harán antes, según defiende. Sucede con Suecia, "que casi lo ha conseguido", y con Nueva Zelanda, que también ha "implantado políticas progresivas para incentivar la adopción de alternativas al cigarro", completa. 

 

 

"Desafortunadamente, en países como España no se ha visto una disminución así del tabaquismo, en parte porque no se ha incentivado la sustitución", dice Di Giovanni, que insiste en que "existen evidencias claras y con base científica de que estas opciones son menos perjudiciales que el tabaco". 

De cara al futuro, defiende Di Giovanni, la investigación y la tecnología de Philip Morris les permite desarrollar otros productos como píldoras que ayuden a dormir, inhaladores parecidos a la aspirina que ayuda a personas con riesgos cardiovasculares y otros productos. "Tenemos la ciencia y la innovación no solo para ayudar a las personas a dejar el tabaco, sino para otro tipo de productos", señala el director de comunicación. 

La multinacional estadounidense no tiene por ahora confirmadas inversiones en España, aunque lo considera "un país clave" en su desarrollo. "Es una opción que se puede contemplar y lo haremos. Pero por ahora, es pronto y especulativo. Tomaremos esta decisión en el momento que sea más adecuado teniendo en cuenta diversos factores, entre los que están que el país dé apoyo a los productos sin humo. Luego hay otros factores como el logístico o la mano de obra. Pero ahora mismo, es pronto para decir algo al respecto". 

A punto de presentar los resultados de 2024, Philip Morris facturó 32.627 millones de euros, un 10% más que el año anterior, con un beneficio neto de 7.813 millones en 2023, un 13,6% menos que en 2022. Los ingresos de Iqos superaron a los de Marlboro.