El Port de Barcelona ha anunciado este martes que invertirá 110 millones de euros en su proyecto Nexigen para descarbonizar la actividad portuaria y mejorar la calidad del aire. Del total de la inversión, 90 millones de euros corresponden a las inversiones que se harán en los sistemas OPS para conectar los barcos a la red eléctrica general una vez estén atracados, utilizando energía limpia con certificación de origen 100% renovable. Los 20 millones de euros adicionales son necesarios para desplegar la red que incluye la Subestación Puerto, la conexión en alta tensión en la Subestación Ronda Litoral de Red Eléctrica y el despliegue de la red de media tensión por todo el recinto portuario.

Con todo, el objetivo de la institución es que en el 2030 el Port de Barcelona tenga electrificados todos los puntos de atraque de los cruceros, el muelle Prat, y las terminales de ferris de la dársena de Sant Bertran y el muelle de Costa, eliminando 66.000 toneladas de CO₂ y 1.234 toneladas de NOx de las emisiones de la actividad portuaria. Eso quiere decir "reducir el 38% del NOx y del CO₂ emitidos por los barcos durante su estancia en muelle y eliminar el 22% de las emisiones de NOx y CO₂ de toda la actividad portuaria", ha adelantado el presidente del Port de Barcelona, Damià Calvet, en la presentación del proyecto Nexigen. A largo plazo, la electrificación de las tenazas del Port de Barcelona será una pieza clave para alcanzar el propósito de ser un puerto climáticamente neutro en el 2050.

José Alberto Carbonell, director general del Port de Barcelona; Damià Calvet, presidente del Puerto de Barcelona, y Ana Arévalo, Energy Transition Manager, durante la presentación de este mañana - Port de Barcelona

 

 

"Los notables beneficios ambientales que se derivarán de la electrificación de las tenazas del Puerto obtienen de este uno de nuestros proyectos estratégicos. Y por eso el Plan nace con un nombre propio: Nexigen". Un nombre, ha explicado Calvet, que tiene su origen en la suma de las palabras next, generation y oxígeno y que encuentra todo su significado en el hecho de que se trata de un Plan "para descarbonizar la actividad y mejorar la calidad del aire, contribuyendo al bienestar de las nuevas generaciones. Un Plan de futuro".

La electrificación de las tenazas es un proceso complejo y que requiere tiempo para su desarrollo. Se tirarán 240 kilómetros de cable y se harán 20,5 kilómetros de canalizaciones hasta las terminales. Las previsiones del Port de Barcelona son "hacer las primeras conexiones eléctricas de barcos en la terminal de contenedores BEST y en la Terminal Ferry de Barcelona entre finales de 2023 y principios de 2024", ha explicado el Energy Transition Manager del Port de Barcelona, Ana Arévalo.

 

 

Ahora hace dos años, el Consejo de Administración del Port de Barcelona aprobó la elaboración del Plan de Electrificación de Tenazas. En marzo de 2021, Red Eléctrica confirmó la construcción de la nueva Subestación Ronda Litoral, una infraestructura clave en el proyecto. Esta nueva subestación de 220 kV estará ubicada muy cerca del Muelle Príncipe de España, en el lado sur de la Ronda Litoral. Y el pasado mes de enero se inició la licitación del proyecto piloto en la terminal BEST.

Puerto de Barcelona

¿Cuáles son los próximos pasos?

Dicho esto, los próximos pasos serán tramitar la petición de acceso y conexión de una posición para gran consumidor en la Subestación Ronda Litoral de Red Eléctrica, una vez se publique la planificación de la red de transporte de energía eléctrica para el periodo 2021-2026, y sacar a licitación el proyecto piloto a la Terminal Ferry durante el mes de abril. La conexión en la Subestación Ronda Litoral hará posible el despliegue de una red por término medio tensión inteligente y flexible que distribuirá energía eléctrica de origen renovable a las diferentes tenazas. Después, en cada muelle se instalarán los OPS con el sistema de gestión de conexión necesario para cada tipo de barco.

La efectividad que el proyecto Nexigen tendrá para reducir las emisiones portuarias está garantizada y permite asegurar a los responsables del Port de Barcelona que se trata de una "acción climática para contribuir a un mejor planeta, con más bienestar para la gente y más respeto por el medio natural," certifica Damià Calvet. "Tenemos perfectamente calculadas las emisiones de los barcos durante su estancia a puerto y, por lo tanto, con el Plan de Electrificación de Tenazas haremos una acción directa para eliminarlas", ha corroborado Arévalo.

Las elevadas inversiones y la complejidad que comporta un proyecto como Nexigen hacen necesaria la colaboración de los puertos con otros actores a escala internacional. Así, en el ámbito de la descarbonización de la actividad portuaria, el Port de Barcelona participa en dos proyectos importantes. Por una parte, el proyecto EALING, que reúne en puertos de 9 países de la Unión Europea, aporta financiación para estudios y análisis de las infraestructuras de conexión eléctrica de barco a muelle (OPS) hasta el proceso de la licitación. Con este proyecto, se busca conseguir una armonización técnica y legal en el ámbito europeo que permita estandarizar los procesos de suministro eléctrico en los barcos. Por otra parte, el proyecto PIONEERS, formado por 46 socios, tiene como objetivo desarrollar soluciones concretas para reducir las emisiones de gases de efecto de invernadero a los puertos, preservando su competitividad. Este proyecto ha recibido una subvención de 25 millones de euros del programa europeo Horizon 2020.