Las elecciones en las Cámaras de Comercio están a punto de finalizar. Los nervios en las puertas de la Cámara de Barcelona, en la Avenida Diagonal, son palpables, aunque todavía quedan más de ocho horas para que se sepan los primeros resultados. Hoy es el último día que se puede votar en estos comicios sin precedentes, de manera presencial en alguna de las delegaciones que la Cámara ha habilitado para emitir el voto electrónicamente y que cerrarán a las seis de la tarde.
Se ha hablado extensamente de lo que implican estas elecciones, no sólo por el cambio del pleno cameral -que hace más de 17 años que gobierna Miquel Valls- sino también porque es la primera vez que se utiliza el voto electrónico en unas elecciones catalanas y lo que podría ser un ensayo como precedente democrático. "Nos lo han puesto muy difícil", explican algunos votantes y candidatos, pero finalmente "parece que ha ido bien". Un voto que según algunas voces comentan, corre el riesgo de impugnación por parte principalmente de la candidatura de Ramon Masià, que se ha quejado reiteradamente de "poca seguridad" y "riesgo de pucherazo" en el voto electrónico remoto.
La satisfacción de Crous
Varios candidatos han pasado cerca de la Cámara de Barcelona para hacer declaraciones a los medios. Es el caso de Enric Crous y José María Torres, que han convocado los medios a las 12 del mediodía para valorar el periodo electoral, asegurando que "hoy es un día de satisfacción porque por lo que sabemos, ha habido bastante participación y por voto electrónico remoto ha votado a mucha gente". Con todo, ni desde la Cambra de Comerç ni desde la Conselleria de Empresa se han hecho públicos todavía los datos de participación remota, aunque fuentes próximas comentan que "no creemos que pase del 5-7% de participación".
Según Crous, "salga lo que salga, estamos contentos porque hemos conseguido que eso de la Cámara esté vivo, y ahora tenemos que esperar los resultados". Con todo, ha valorado "positivamente" el voto electrónico y su funcionamiento durante estos días. Culé como es, sólo una queja: "Hoy sólo estoy enfadado por la eliminatoria del Barça".
La seguridad de Tusquets
Si alguna cosa ha mostrado al financiero Carles Tusquets, presidente del Banco Mediolanum i de Trea Capital, ha sido seguridad. En un desayuno con la prensa esta mañana, Tusquets ha aseverado que de entrada, aunque todo apunta que los resultados mostrarán un pleno muy diverso, "no me planteo pactar con nadie porque nosotros aspiramos a ganar las 40 sillas". En caso de que se tenga que pactar, "hablaré con todos y a ver si llegamos a acuerdos con alguien pero no jugaré a cambiar cromos con nadie". Al mismo tiempo, ha asegurado que "creemos que nosotros somos mejores que los otros".
Tusquets también se ha mostrado satisfecho con el funcionamiento del voto electrónico "aunque hubo algunas moderaciones el lunes", pero ha explicado que "habría hecho falta más control antes del voto y no después". Con todo, ha explicado que estas elecciones son un ensayo del voto electrónico para implementarlo en otro ámbitos, cosa que "este ensayo pienso que se tendría que haber hecho con otras elecciones menos complejas".
El silencio de Masià
Ramon Masià no ha querido hacer declaraciones antes de los resultados de esta noche. Con todo, Masià ha estado muy activo estos últimos días enviando quejas y cartas de recurso, todavía con la amenaza de la impugnación en las manos.