Cien-cincuenta años atrás nacía Francesc Moragas, el hombre detrás del alma de "la Caixa". Con él, en 1904 nació "la Caixa" y la Obra Social, un proyecto que ha vivido una gran evolución desde entonces. Moragas, descrito por el presidente de la Fundación Bancaria "la Caixa", Isidre Fainé, como "una figura primordial tanto para 'la Caixa' como para el país", era un hombre discreto, "un emprendedor con vocación de liderazgo".

En motivo del aniversario del fundador de la institución, Fundación "la Caixa" ha homenajeado la figura de Moragas en un acto en la torre de los Servicios Centrales de la entidad de la Diagonal. Además, la entidad también ha abierto una exposición sobre Moragas, bajo el título El hombre detrás del alma, en la cual se pueden ver objetos personales y que sigue la vida del fundador.

Un acto que ha reunido las grandes personalidades del mundo empresarial y económico catalán, como el presidente de CaixaBank, Jordi Gual y su consejero delegado, Gonzalo Gortázar; el director general de la Fundación Bancaria "la Caixa", Jaume Giró; el expresidente del Puerto de Barcelona, Sixte Cambra; el presidente de Fomento del Trabajo, Josep Sánchez-Llibre y su antecesor, Joaquim Gay de Montellà; el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls; el expresidente de Abertis, Salvador Alemany y el presidente del grupo Agbar, Àngel Simón, entre muchos otros.

Fainé reivindica la figura de Moragas

Con motivo de esta efeméride, Isidre Fainé, ha querido profundizar en la figura de Moragas, su pensamiento, proyectos y legado, "plenamente vigente en la Obra Social actual". Lo ha hecho en el transcurso de una conferencia que marca el inicio del homenaje que la entidad rinde a su fundador a través de diferentes iniciativas. De su lado, el director general de la Fundación Bancaria La Caixa, Jaume Giró, ha destacado que Moragas fue una "figura excepcional" con una obra "ingente" y que para rendirle homenaje también se ha editado una biografía de Moragas a cargo de Francesc Cabana.

Durante el discurso, Fainé ha querido reivindicar la tarea de Moragas, asegurando que ha sido una figura "primordial tanto para 'la Caixa' como para el país". El presidente de la Fundación ha descrito al homenajeado como una persona con unos conocimientos sólidos en humanidades, con un pensamiento inspirado "claramente en la doctrina social cristiana" y "una sensibilidad social para la justicia".

Moragas ha sido una figura primordial" para 'la Caixa' y para el país" - I. Fainé

Al mismo tiempo, asegura que era "un hombre de acción y de reflexión", con un liderazgo definido por cuatro categorías: "un emprendedor con sentido social, un gran innovador y un negociador tenaz; con una gran ambición, en el sentido de una fe muy sólida en sus proyectos", ha explicado Fainé. Además, "fue capaz de imaginar, concebir y crear una gran corporación, que combina solvencia, rentabilidad y compromiso social".

La historia de un legado

Hacía tiempo que Moragas tenía en la cabeza la idea de crear una caja de pensiones, pero fue la huelga general de 1902 la que aceleró los planes. Durante aquella época, los obreros reclamaban mejoras de sus condiciones laborales y las personas mayores no tenían ningún tipo de pensión. Fue entonces -en realidad, fue en 1904- que Francesc Moragas creó lo que ahora conocemos como 'la Caixa', una institución "que combina éxito económico e impacto social".

Moragas se convertiría así en la cara detrás del alma de 'la Caixa'; una institución que a partir de 1935 empezó a crecer de manera exponencial, y previamente, en 1915, se iniciaba la expansión de la Obra Social. Fainé explica que se trataba de un hombre adelantado a su tiempo, luchador por "la promoción de políticas que hoy diríamos de igualdad".

Fainé explica que la respuesta de las clases populares a la aparición de "la Caixa" no se hizo esperar, y en mucho pocos años esta administraba más de la mitad del ahorro de los catalanes. En vida de Moragas, hasta 1935, se habían abierto un centenar de oficinas a todo Catalunya y a Baleares, Madrid y Andorra.

Al mismo tiempo, Fainé también ha querido mencionar al director general Josep Maria Boix i Raspall, a quien le tocó liderar 'la Caixa' en plena Guerra Civil, pero que "resistió y mantener la institución en funcionamiento". También ha hecho mención a Josep Vilarasau, al primer ejecutivo de La Caixa, quién, con su llegada en 1976 "supuso una revitalización para la entidad". Por último, Fainé también ha reconocido méritos al ejecutivo Ricard Fornesa, quien a partir del 2003, "quiso poner el énfasis en las personas y la acción social", ha explicado.

Moragas, según Pla

El escritor y periodista Josep Pla conoció a Francesc Moragas un día, pero no fue hasta 1935, cuando murió Moragas, que Pla escribió un perfil. Pla explica que sólo coincidieron una sola vez, pero que fue suficiente para que le cayera "simpático".

No teniendo necesidades, me he hecho mías las necesidades de los otros" - F. Moragas

Pla describe Moragas como un hombre "de una discreción impresionante", aunque para el escritor "era uno de los hombres más importantes del país, y no lo parecía". En la conversación entre Pla y Moragas, el periodista explica que el fundador de 'la Caixa' le explicaba que "yo no voy a las celebraciones de 'la Caixa', trabajo para la entidad por mi convicción". Además, añadía: "No soy modesto, soy el hombre más ambicioso del mundo. No teniendo necesidades, me he hecho mías las necesidades de los otros".

Estas palabras de Pla, hoy las ha leído el actor Oriol Vila en el auditorio de 'la Caixa', en una pequeña interpretación acompañada también de piano y voz en directo.

Pla también explica que el político Francesc Cambó solía decir que "Moragas, con la Caixa, ha fundado la creación más importando de este país, seguramente, y la más catalana. Ha creado la realidad pura y simple". El perfil de Pla de Moragas es una mezcla entre admiración y reconocimiento al fundador de la entidad. Antes de morir, explica Pla, Moragas dijo "me sabe grave de morir, porque tenía 3 o 4 ideas que se hubieran podido aplicar a 'la Caixa'".

Y es que Moragas murió a los 66 años, el 27 de marzo de 1935, en la Clínica de Cirugía del Instituto de Santa Madrona, que él mismo había inaugurado. Los diarios se llenaron de necrológicas y semejanzas de su persona, similares a las palabras de Pla: "Un hombre sencillo, modesto y trabajador incansable". Su comitiva fúnebre, que salió de la que era entonces la sede central de 'la Caixa' en la Vía Layetana dos días después, fue multitudinaria y reunió miles de ciudadanos en el centro de Barcelona.