Los resultados de las elecciones generales del 10-N han dejado la disposición del hemiciclo del Congreso de los Diputados en una situación todavía más difícil que la que tenía. El líder socialista, Pedro Sánchez, convocó elecciones ante las dificultades de un pacto de izquierdas para formar gobierno, y con la idea de que unos nuevos comicios le darían una mayoría más amplia. No ha sido así. El PSOE ha ganado las elecciones pero ha perdido a 3 diputados; y la victoria de la jornada ha sido para la derecha y la extrema derecha, con un remontamiento del PP respecto del 28-A, y un VOX que ha más que doblado los resultados, llegando a los 52 diputados. Por el contrario, el líder de Cs, Albert Rivera, se ha visto obligado a dimitir después del porrazo recibido. El mapa de colores se cada vez más diverso y el pactómetro va loco. ¿Y ante esta situación, qué opina el empresariado catalán y los agentes económicos?
De entrada, los agentes económicos hace tiempo que piden "estabilidad" y reiteran la "necesidad de aprobar los presupuestos", tanto a nivel estatal como autonómico. Tal como se reparte la cámara baja de las Cortes generales, esta estabilidad y llegar a un consenso para aprobar cualquier cosa parece un escenario todavía más alejado de lo que era la composición del 28-A. Y así lo ven también la gran mayoría de entidades que han valorado los resultados del 10-N, como la patronal Pimec, Cecot o incluso los sindicatos, que hacen consideraciones en la misma línea. Todos, de hecho, coinciden en el hecho de que unas terceras elecciones "no serían una buena noticia".
Patronales
Las patronales han sido las primeras a decir la suya. Pimec, liderada por Josep González, los resultados del 10-N hacen "más difícil" la gobernabilidad, motivo por el cual reclama "responsabilidad y agilidad" a todos los partidos para constituir un gobierno estable. "El país no se puede permitir unas terceras elecciones", asegura a la patronal, que ha reclamado fórmulas de diálogo y compromiso que den estabilidad para gobernar. Ha indicado que es muy necesario ya que hay un momento de ralentización de la economía que necesita de un gobierno "que haga reformas cuanto antes y que transmita confianza a los ciudadanos, las empresas y a los inversores". En este sentido, ha alertado de que más meses de incertidumbres, inseguridad e ingobernabilidad "podrían tener consecuencias negativas para la economía y la sociedad".
Muy similares son las palabras de la egarense Cecot, que con Antoni Abad al frente, utiliza otra vez la frase que más utilizaron los agentes sociales después de la sentencia: "Casa de la política en mayúsculas". Una manera suave de decir que hay que ponerse las pilas, y advierte que el escenario postelectoral evidencia que "obviar los problemas dando saltos adelante no ayuda a resolver la situación". A diferencia de González, Abad es más contundente con Pedro Sánchez, aseverando que "la repetición electoral es consecuencia de la falta de cultura de negociación política en España, la complejidad social se gobierna con acuerdos y coaliciones pero por eso los liderazgos tienen que cambiar", insiste. Además, remarca que la "inestabilidad" en el Estado está perjudicando la economía y hace referencia a la situación de Catalunya asegurando que es una de las cuestiones pendientes. Por último, reitera la necesidad de presupuestos.
Finalmente Foment del Treball, encabezada por Josep Sánchez Llibre, ha sido la última a decir la suya, y en el tono moderado que lo caracteriza, ha felicitado al PSOE por su victoria y le reclama que busque en breve las alianzas para formar un gobierno "estable y moderado". De hecho, la patronal catalana reclama al conjunto de fuerzas políticas una actitud de "compromiso y responsabilidad" para favorecer la gobernabilidad de España: "Es ya urgente". Además, desde Fomento consideran que "el clima de diálogo y concertación social entre los agentes sociales ha sido fundamental y ofrecemos toda nuestra colaboración delante del nuevo escenario político en el cual más que nunca es imprescindible la moderación y el pacto", han continuado desde Foment del Treball, que ha reiterado que la urgencia de constituir ya un Gobierno y facilitar una Ley de Presupuestos "que dé estabilidad y rigor" al nuevo ejecutivo.
Los autónomos, a través de la patronal ATA, su presidente Lorenzo Amor, ha apuntado que si en el 2016 era "de responsabilidad" la abstención del PSOE para facilitar un gobierno del PP, ahora la abstención del PP "también es de responsabilidad". Con contundencia, Amor ha añadido que pensar el contrario "no es ser precisamente responsable". La federación ha valorado que el escenario después de las elecciones de este domingo es "todavía más complicado" para la estabilidad y ha reclamado a los responsables políticos "diálogo, estabilidad y moderación", a la vez que ha asegurado que hay fórmulas para buscar acuerdos y, en concreto, ha apostado por una "de fuerzas moderadas y constitucionalistas".
Por su parte, las patronales españolas Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME) han mostrado su respeto por el resultado de las elecciones del 10-N y han pedido a los partidos políticos "responsabilidad y visión transversal" para formar un gobierno "establo y moderado". "No nos podemos permitir unas nuevas elecciones", han alertado a las dos patronales. "Las empresas y la sociedad española necesitan, desde el rigor presupuestario y la ortodoxia económica, avanzar en las reformas pendientes, priorizando la formación, la innovación, la digitalización y las pensiones", han enumerado la CEOE y CEPYME en un comunicado conjunto. Las patronales también reclaman al nuevo Gobierno medidas para favorecer la internacionalización, el impulso de la sostenibilidad, una tributación más competitiva y la unidad de mercado.
Sindicatos
CCOO de Catalunya ha estado más punzante. Según el sindicato, "la repetición electoral ha reiterado la necesidad de un acuerdo de izquierdas y plurinacional", y asevera que el resultado "ha mostrado la desafección de la ciudadanía con la política por el bloqueo institucional y político que se sufre desde hace demasiado tiempo, y eso se ha traducido en menos participación y en el reforzamiento de la extrema derecha como tercera bastante política a costa de la caída libre de Ciudadanos". De hecho, es la única entidad que ha hecho mención al auge de la extrema derecha, el cual critica y destaca que "no puede haber una normalización democrática de la participación de la xenofobia, la homofobia, el machismo y el neofascismo. Tampoco de la utilización del sentimiento anticatalán". En este sentido, CCOO hace un llamamiento a no blanquear el fascismo y a combatirlo.
Por el contrario, celebra que en Catalunya la izquierda gana con creces, "hecho que obliga a los partidos de signo progresista a encontrar un marco de negociación que rompa el bloqueo institucional y político que se vive en Catalunya desde hace demasiados años". El sindicato considera que la agenda social es la que ha protagonizar el debate de investidura para constituir un necesario gobierno de progreso. "Y son muchos los temas que configuran esta agenda social y que hace falta abordar con urgencia, como la reforma laboral, las pensiones, la vivienda, la protección social, la política fiscal, el cambio de modelo productivo, las políticas energéticas y climáticas, las transformaciones digitales y tecnológicas, los retos demográficos, la feminización de la sociedad o las políticas para jóvenes".
Cambra de Comerç
El presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona, Joan Canadell, fue el primero a hacer sus reclamos después de los resultados. No esperó a hacer un comunicado oficial, y a través de su perfil de Twitter ya apostó por un pacto entre el PSOE y Unides Podem con el apoyo de Junts per Catalunya y ERC y que, a cambio, ofrezca un referéndum acordado. "Ahora tendría que salir Pedro Sánchez y decir que ha entendido el mensaje y que hay que hacer gobierno estable y rápido. La única opción si pensara en la economía es pactar con Podemos, ERC y JxCat y a cambio ofrecer un referéndum acordado", reivindicaba.