Endesa ha propuesto a los ayuntamientos catalanes que tienen más de cinco vecinos en situación de vulnerabilidad con una deuda conjunta de unos 10.000 euros en recibos de la luz impagados que asuman el 50% de la deuda y la compañía eléctrica se hará cargo del otro 50%. En un comunicado, la compañía ha informado este jueves que ha enviado una carta con la propuesta a los ayuntamientos que tienen vecinos en esta situación, a quienes las eléctricas no pueden cortar el suministro.
"La propuesta, basada en un compromiso conjunto entre las administraciones públicas y Endesa, permite superar la situación actual y evita el endeudamiento de los colectivos vulnerables", ha argumentado la empresa. Endesa ha indicado que tiene detectadas unas 25.000 personas vulnerables a Catalunya a través de los servicios sociales de sus ayuntamientos, que suman una deuda de más de 21 millones de euros en luz, entre los años 2015 y 30 de junio de este año. De estas 25.000 personas, el 30% se ha acogido a los descuentos en el recibo de la luz establecidos en el llamado bono social, aprobado a final del 2017.
Estas personas en situación de vulnerabilidad, tanto las que se han acogido al bono social como las que no, "siguen acumulando deuda", y de aquí la propuesta de Endesa que los consistorios asuman el 50%. En total, según la propuesta, Endesa se haría cargo de una deuda de 10,5 millones de euros, mientras los ayuntamientos tendrían que hacer frente al resto hasta los 21 millones que calcula la empresa eléctrica que deben unos 25.000 abonados vulnerables a Catalunya.
La ley catalana 24/2015 de medidas urgentes para afrontar la emergencia en el ámbito de la vivienda y la pobreza energética establece, en su artículo 6, que "las administraciones públicas tienen que establecer los acuerdos o convenios necesarios con las compañías de suministro de agua potable, gas y electricidad para garantizar que concedan ayudas a fondo perdido a las personas y unidades familiares en situación de riesgo de exclusión residencial o los apliquen descuentos mucho notables en el coste de los consumos mínimos".
El bono social es un tipo de tarifa con un descuento fijado por el Gobierno del Estado que tiene como objetivo proteger a los usuarios con menos posibilidades económicas. Este descuento se aplica automáticamente a los clientes con suministros de potencia contratada inferior a 3 kW, pensionistas y familias numerosas o en las que todos los miembros en edad de trabajar son en paro.
Endesa ha llegado los últimos años a numerosos acuerdos con consistorios y comunidades autónomas para que asuman las deudas de sus vecinos vulnerables que no pueden asumir los gastos del suministro básico de luz. En Catalunya, ha llegado a acuerdos con 35 ayuntamientos, lejos de los 74 de Andalucía o los 47 de Galicia, según se informa en la página web de la compañía.