Todo el Estado español podría quedarse sin suministro de algunas bebidas alcohólicas, especialmente de cara a las fiestas de Navidad. El bloqueo por el Brexit, sumado a la crisis internacional de transporte y combustible, hace que algunas marcas ya tengan dificultades para hacer llegar las bebidas a nuestro país, como es el caso de Seagrams, Beefeater o Absolut.
Ahora mismo, Europa vive un cóctel de factores que hace que podamos llegar a no poder comprar estos productos: han aumentado los costes del transporte, las materias primas no llegan y hay un atasco en las aduanas por el Brexit. Y eso podría agravarse, y mucho, en Navidad, ya que el consumo de alcohol se multiplica y también sube la demanda del transporte de mercancías.
De hecho, algunos bares y restaurantes ya se han visto obligados a ir a comprar alcohol a los supermercados porque los proveedores se han quedado sin y temen por lo que pueda pasar en las próximas semanas. Eso llega precisamente en un momento en que se han relajado las restricciones y ha aumentado el consumo de las bebidas alcohólicas.
Los productos de proximidad
La otra cara de la moneda, sin embargo, es que esta ausencia de marcas internacionales ha favorecido la venta de otras producidas en nuestro territorio, un cambio de consumo que podría venir para quedarse. Pero las marcas locales también notan los problemas, ya que les está fallando el suministro de vidrio y corcho por las crisis mencionadas anteriormente.
Escasez según el alcohol
El ron, producido principalmente en el Caribe, podría ser uno de los alcoholes más afectados por el altísimo coste que ahora mismo tiene el transporte y que han provocado grandes retrasos en las existencias de muchos productos. El güisqui, mayoritariamente de producción inglesa, en cambio, se vería afectado por la crisis del Brexit.
Por el contrario, el vino, el cava y la cerveza que consumimos se producen casi completamente en nuestro país y, por lo tanto, el suministro, en principio, estaría asegurado. Sin embargo, estas empresas tendrán dificultades para exportar, que es lo que hacen con el 40% de la producción. En el Reino Unido ya sufren, por ejemplo, por la falta de cerveza.
Una situación muy peligrosa para el sector
El director ejecutivo de la patronal de Espirituosos de España (FEBE), Bosco Torremocha, explica que hay un desabastecimiento de los mercados y alerta de que si la situación se prolonga, algunas compañías incluso verán comprometida su supervivencia: "Una rotura de existencias es un drama para una empresa. Si se alarga y no puedes atender pedidos, no tienes facturación y, por lo tanto, no tienes liquidez".
Preguntado por sus estimaciones de cara a Navidad, declina hacer cualquier tipo de previsión: "No puedo pensar en la campaña de cara a final de año, como representante del sector estoy centrado ahora mismo en el día de mañana, en cómo resolver esta crisis cuanto antes", insiste.