Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya (FGC) invirtió 100 millones de euros en la compra de 15 nuevos trenes en el 2018, que prevé incorporar el año 2021 a la línea Barcelona-Vallès, según ha anunciado su presidente, Ricard Font, en la presentación de los resultados de la empresa pública.
Font ha asegurado que estas nuevas incorporaciones permitirán en el 2021 la circulación de un tren cada dos minutos y medio desde Barcelona con destino a Sant Cugat del Vallès, y otro cada cinco minutos con destino a Sabadell y Terrassa.
Sobre los resultados del 2018, Font ha destacado que el servicio batió el récord histórico de viajeros, con un total de 87,4 millones entre las líneas metropolitanas y la línea Lleida-la Puebla, y también batió el récord de puntualidad y valoraciones. Por otra parte, FGC transportó el año pasado 411.572 toneladas de sales potásicas de las minas de Súria y Sallent, casi 95.000 vehículos de la marca SEAT, y realizó 1.305 circulaciones de transporte de componentes automovilísticos para esta misma marca.
El año 2018, FGC también recibió nuevos proyectos como la conexión de las estaciones de plaza España y Gracia - para la que el Gobierno calcula que se invertirá 238 millones de euros -, el tren-tramo del Campo de Tarragona y la lanzadera del aeropuerto del Prat.
Aquel mismo año, FGC emprendió un plan medioambiental con el cual esperan que, al acabar 2019, todos los sus convoyes funcionen con energía eléctrica 100% renovable, y que en el 2020 el 25% de esta energía provenga de instalaciones fotovoltaicas.
Font ha adelantado que la empresa mantendrá una inversión de 100 millones de euros anuales en mantenimiento hasta conseguir que en el 2021 todas las líneas estén renovadas al 100% y su oferta se encuentre a su "máxima capacidad" para hacer frente a la demanda. Una vez se incorporen los 15 nuevos convoyes a la línea Barcelona-Vallès, la empresa pública prevé que el año 2022, al incrementar las frecuencias de paso, el número de viajeros del servicio abarque los 90 millones.