Fira de Barcelona ha reducido su facturación a 60 millones de euros en el 2021 delante de los 82 millones del 2020 y prevé cerrar el año con un Ebitda negativo de 10 millones. El consejero delegado de Fira de Barcelona, Constantí Serrallonga, ha dejado claro, sin embargo, que no son resultados comparables porque durante la primera mitad de año no hubo actividad ferial, que se reactivó con el ISE y el Mobile World Congress en junio. El presidente de Fira de Barcelona, Pau Relat, ha explicado que es "moderadamente optimista" de cara en el 2022 y espera cerrarlo con una facturación de 170 millones, cerca de los 220 millones del 2019. Serrallonga ha comentado que los organizadores del MWC y el ISE, previstos para en febrero y marzo, mantienen la voluntad de celebrarles a pesar de la variante ómicron.
Serrallonga ha admitido que el 2021 ha sido un año "complejo" y "más difícil" del previsto inicialmente, ya que se contaba con un presupuesto expansivo, sin embargo, "se puso la realidad". En este sentido, ha recordado que el primer semestre no hubo actividad ferial, hasta que no pudo celebrarse el ISE y el MWC, con un formato mucho más pequeño. "En el último cuatrimestre, volvimos a la normalidad. Hemos demostrado que podemos hacer ferias en este contexto", ha señalado el consejero delegado de Fira de Barcelona.
Serrallonga ha defendido que las ferias "son más necesarias que nunca" y que la diferencia con diciembre del 2020 es que el mercado estaba "más ausente" y ahora hay un impulso por volver a la actividad. De hecho, el directivo ha comentado que los datos de facturación de este año no son comparables con las del 2020 porque además de no estar actividad los primeros seis meses los salones que sí que se han podido celebrar han sido en formatos más pequeños.
El consejero delegado ha explicado que Fira de Barcelona ha trabajado "fuerte para tirar adelante" y lo ha comparado con un transatlántico o correr un maratón. Para hacer un maratón, primero tenemos que hacer pequeñas carreras, ha dicho. Es por eso, que la facturación para el 2022 se estima en 170 millones de euros, una pizca por debajo de todavía de los 220 millones de euros del 2019, precisamente porque todavía serán salones de dimensiones más reducidas.
Tractor económico
En este contexto, tanto Serrallonga como Relato han asegurado que la misión de Fira "no es ganar dinero, sino ser tractor de la economía". "El objetivo no era la rentabilidad, sino preparar la actividad para uno grande 2022", ha subrayado. Además, este año Fira de Barcelona ha considerado que no era necesario recibir las aportaciones extraordinarias que hicieron las administraciones presentes al consejo, tal como hicieron el año pasado.
Serrallonga también ha explicado que Fira de Barcelona fue el primero de los recintos europeos que recuperó la actividad, con el MWC (también fue el primer gran salón a cancelarse en el 2019) y el ISE. Sobre estas dos ferias, el consejero delegado de Fira de Barcelona ha asegurado que tanto la GSMA como los organizadores de la feria audiovisual les han transmitido la voluntad de venir a Barcelona a en febrero y marzo, a pesar de la expansión de la variante ómicron. "No solo ellos, sino también sus expositores", ha detallado Serrallonga.
130 acontecimientos en el 2022
A lo largo del 2021, los recintos de Montjuïc i Gran Vía han acogido una cincuentena de acontecimientos, además del ISE y el MWC, como|cómo l'Automobile, Expoquimia, Smart City Expo, Tomorrow Mobility, el Salón Náutico y el Manga Barcelona, entre otros. De cara al 2022, un año que el presidente de Fira de Barcelona, Pau Relat, ha dicho que todavía con "moderado optimismo", entre los tres recintos del grupo -Montjuïc, Gran Vía y el Centro de Convenciones Internacionales de Barcelona- y los que se exportan en otros países como Smart City y Alimentaria se celebrarán 130 acontecimientos.
Serrallonga ha destacado que serán ferias donde se recuperará la presencialidad. "Es la esencia de nuestras ferias", ha comentado. Y es que a pesar de la incorporación de los formatos digitales, ya antes de la pandemia, los expositores prefieren asistir personalmente. Entre los tres recintos, después de la incorporación reciente del CCIB, Fira de Barcelona cuenta con un presupuesto de 170 millones de euros. Los responsables de Feria han puntualizado que estos tres recintos no luchan entre sí, sino que los competidores son otras capitales europeas como Viena y París.
Los planes de ampliación siguen adelante
El presidente de Fira de Barcelona, Pau Relat, ha asegurado que los planes de ampliación de Fira de Barcelona siguen adelante. "La ampliación es más vigente y tiene más sentido que nunca", ha sentenciado Relato, que ha añadido que la Feria quiere "reafirmar su liderazgo a medio y largo plazo a escala europea así como cumplir la misión de motor social y económico".
La rueda de prensa de este miércoles también ha contado con la participación del conseller de Empresa i Treball, Roger Torrent, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, los cuales han puesto de relieve la importancia que tiene la Fira de Barcelona en el crecimiento tanto de la capital catalana como del país. Torrent ha destacado que, aparte de la generación de empleo, los acontecimientos que organiza la feria "proyectan Catalunya en el mundo y dinamizan la economía productiva".
Al mismo tiempo, ha remarcado que se trata de un activo "muy importante para la transformación del sistema productivo en el país" y ha añadido que la Feria "es el ejemplo de cómo abordar un objetivo de país desde el consenso de las administraciones públicas y el sector privado".
Por su parte, Colau se ha mostrado optimista de cara al futuro de la institución y ha apuntado que la Feria "demostrará una vez más su capacidad de resiliencia". En este sentido, la alcaldesa ha felicitado al ente para "estar a la altura" en los momentos "más complicados de la pandemia", convirtiéndose en un espacio para acoger a personas sin y hogar o, posteriormente, en el punto de vacunación más relevante del país.