La patronal Foment del Treball ha pedido este jueves una decena de mejoras fiscales en Catalunya para poder competir con la Comunidad de Madrid, que pasan por optimizar el modelo de financiación autonómica del Estado y reducir la carga de tributos propios de la Generalitat, ya que las dos cosas "penalizan" la actividad económica.
Así lo ha expuesto en una rueda de prensa al presentar el informe Por una fiscalidad competitiva, del cual la patronal ha extraído una docena de propuestas, y su presidente, Josep Sánchez Llibre, lo ha enmarcado en el objetivo de mantener el Estado del Bienestar y que Catalunya atraiga inversiones y talento.
"Lo que pedimos es una reflexión. La Generalitat ha tenido que recurrir a estos 18 tributos porque no tenemos un buen sistema de financiación", ha sostenido, puntualizando que su declaración no es una crítica fiscal a la Generalitat. En esta línea, han señalado que Catalunya es la comunidad autónoma con más tributos propios de España, con 18, pero la recaudación sólo es superior en un punto más (3,2%) con respecto a la media del resto de autonomías (2,2%).
"Catalunya tiene una carta de presentación de impuestos altos, cosa que no facilita ni la atracción ni la retención de talento", ha valorado el presidente de la comisión de Economía de la patronal, Valentí Pich, que ha defendido que primero hay que crear riqueza para que haya un excedente y después se reparta a la sociedad.
Por su parte, el secretario general adjunto de la patronal, Salvador Guillermo, ha insistido en que se tiene que revisar el modelo de financiación de las comunidades de régimen común y que antes de subir impuestos hay que combatir el fraude.
Supresión del impuesto del patrimonio
Una de las demandas que la patronal ha querido remarcar es la supresión del impuesto del patrimonio, una figura que para Foment "no tiene ninguna lógica", que se creó con carácter extraordinario y que disuade y distorsiona la actividad económica. Además, han apuntado que este impuesto tiene un efecto redistributivo muy menor, del 0,3%.
En este sentido, Guillermo ha recordado que la Comunidad de Madrid bonifica al 100% este impuesto. "Quien no se dé cuenta de eso no sabe que vivimos en un mundo abierto y que eso tiene consecuencias", ha añadido.
Este no es el único impuesto que hay que reducir, según Fomento. También habría que eliminar del impuesto sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados la imposición por documentos notariales, "obsoleta en un sistema fiscal moderno".
Las rebajas fiscales, "imprescindibles"
En el ámbito de las rebajas fiscales, el presidente de la entidad ha destacado la rebaja de los tipos marginales del IRPF, que ve "imprescindible". En lugar de los tipos actuales en Catalunya, ha propuesto que se sitúen a los niveles de la Comunidad de Madrid, en un 18,5% para las rentas más bajas, y en un 43,5% en las rentas más altas.
Otra reducción es la que se pide para el impuesto sobre sucesiones y donaciones, para dejarlo en el 5% para los parientes próximos y el 10% para el resto. En el caso del impuesto de sociedades (25%), la patronal considera que se tiene que establecer un tipo más reducido (15%) para pymes y para los beneficios no distribuidos para aproximarlo a la media europea. Además, propone ampliar a 10 años el plazo para el tratamiento especial de no residentes y bajar el tipo de IVA reducido y superreducido en las actividades básicas.
Reducir la economía sumergida
En general, la patronal ha enfatizado que a fin de que esta rebaja fiscal se lleve a cabo sin estropear la cohesión social ni el estado del bienestar, se tiene que luchar contra la economía sumergida. De esta manera, se pueden incorporar ingresos en las arcas públicas "que nunca han recibido" y más si se tiene en cuenta que el volumen de recaudación del Estado español es "considerablemente inferior" al de los principales países de la Unión Europea (UE). En concreto, Sánchez Llibre ha pedido que se saque adelante un plan estratégico por reducir del 25% al 15% el peso de la economía sumergida en relación en el PIB, cosa que permitiría recaudar 40.000 millones de euros cada año.