La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) contradice las previsiones al alza del Gobierno con respecto al PIB. La entidad ha revisado drásticamente a la baja las previsiones sobre el crecimiento económico para España este año. Según la OCDE, el crecimiento de la economía se situará en un 4,5%, muy por debajo del 6,8% que había amado en septiembre La Moncloa y que el mismo Ejecutivo de Pedro Sánchez rebajó hace semanas a un 6,5%.
La previsión a la baja de la OCDE, en caso de cumplirse, implicaría que la economía española no recuperará el nivel previo a la pandemia hasta el primer trimestre del 2023, año en que se prevé que el PIB crezca un 3,8%, según expone la ACN.
Uno de los principales obstáculos en la recuperación de la normalidad prepandemia es la deuda del Estado. La OCDE calcula que el Estado cerrará el año con una deuda del 120,1%, una décima más que el 2020, para reducirlo hasta el 117,1% el año que viene. No será hasta el 2023 que la deuda disminuirá hasta el 115,9. "La elevada deuda requiere una prudencia fiscal renovada una vez la recuperación esté firmemente encaminada", dice la organización.
Dos mujeres compran en un horno / Europa Press
En este contexto complicado por la economía española, la entidad prevé que el gobierno del Estado mantendrá una política económica de apoyo a la economía en el 2022 y "neutral" en el 2023.
En cambio, las previsiones de la OCDE a escala global aseguran que la economía global crecerá un 5,6% este año, un 4,5% lo que viene y un 3,2% en el 2023. A pesar de este enfoque positivo del futuro, el informe de la entidad apunta que la principal prioridad mundialmente tiene que ser el acceso a las vacunas por todo el mundo para facilitar la recuperación económica. También señala que hay que mantener el apoyo a la economía porque las previsiones son todavía "inciertas" y los mercados laborales no se han recuperado completamente.
Principal motor económico
Entre los aspectos positivos que la OCDE ha encontrado en el estado y el futuro de la economía española se encuentra la demanda interna, la cual augura que será el principal motor económico este año.
"El aumento de la confianza, las mejoras en las condiciones del mercado laboral, las condiciones de financiación favorables y los fondos europeos Next Generation impulsarán el consumo privado y la inversión", dice el documento.
Más malos augurios para el Gobierno
Escepticismo sobre las previsiones de crecimiento del Gobierno no se limita a la OCDE. Dejando de lado que el mismo Ejecutivo de Sánchez modificó su previsión de crecimiento ligeramente a la baja, otras entidades internacionales han dado un toque de atención al Gobierno por sus previsiones infladas.
El pasado mes de julio, el Fondo Monetario Internacional (FMI) contradijo las previsiones de crecimiento del PIB que ha anunciado este martes el Gobierno rebajando sus expectativas para el Estado de cara a 2021 hasta el 6,2%
Imagen principal: Un grupo de personas compran por el centro de Madrid / Europa Press