José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Caixabank, ha exigido el mismo nivel de regulación para los nuevos actores del sector bancario. En un debate sobre los retos de la economía española durante la Reunión del Cercle d'Economia, Goizigolzarri, se ha mostrado partidario de qué haya una mayor competencia en el sector porque obliga a los bancos a coger músculo, pero ha advertido que es necesario establecer normas iguales para todos para no repetir errores del pasado. Paralelamente, ha reivindicado el papel de la banca para movilizar los fondos europeos. Además, ha defendido que el sector tiene la capacidad de movilizarlos, tiene criterio para valorar las operaciones y la capilaridad para hacerlos accesibles.
El presidente de Caixabank ha reconocido que, aunque ahora hay sectores que están en "un gran boom", otros, como la banca, están en un proceso de reestructuración que comportará despidos. Delante de eso, ha defendido que el sector tiene la obligación de facilitar la reincorporación de los afectados por el ERE en el mundo laboral dándoles "nuevas habilidades". Gorigolzarri ha reconocido que la banca está tremendamente impactada por la transformación tecnológica, pero ha considerado que hay que verla como una oportunidad, para mejorar el servicio a los clientes y encontrar nuevas oportunidades de negocio.
En este mismo debate también ha participado Carme Artigas, secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, que ha detallado, que su departamento está valorando las empresas "con parámetros del siglo XIX" a las cuales hay que incorporar nuevos indicadores como "el talento, los datos o la capacidad de generar disrupción". De hecho, según su opinión, no hacerlo puede llevar a "tomar decisiones que no tienen en cuenta el largo plazo".
Artigas ha detallado que el 43% de la población no tiene las competencias básicas digitales y delante de eso ha considerado que hay que hacer "un cambio de mentalidad y dar apoyo en las empresas para que formen a sus trabajadores con estas nuevas competencias". En este sentido, la secretaria de estado ha subrayado que el tejido empresarial tiene una oportunidad con el plan de digitalización de pymes del Gobierno, dotado con más de 4.000 millones de euros. "Estos fondos tienen que permitir que las pequeñas y medianas empresas trabajen en red y escalar su negocio", ha concluido.
Por su parte, José Luis Bonet, presidente de la Cámara de Comercio de España ha criticado que Europa no ha puesto la internacionalización dentro de las pautas de los fondos europeos. En este sentido ha afirmado que al Estado le queda "mucho recorrido" y que se tiene que poner como objetivo prioritario "mediante la colaboración público-privada".