La multinacional catalana de hemoderivados Grifols ganó 423,4 millones de euros durante los nueve primeros meses del 2019, un 9,6% menos que durante el mismo periodo del 2018, aunque sus ingresos repuntaron un 14,5%, hasta los 3.738 millones. En un comunicat en la CNMV Grifols justifica la caída del beneficio por la evolución de los tipos de interés, por efectos derivados del cambio de normativa contable, así como por la ausencia de extraordinarios, ya que en el 2018 recibió 32 millones por la desinversión A TiGenix.
A tipo de cambio constante, es decir, sin tener en cuenta el efecto del tipo de cambio, los ingresos hasta septiembre se elevaron un 9,7%. La multinacional sigue apostando fuerte por las inversiones, y hasta septiembre invirtió 188,5 millones, un 16% más que el año pasado, a seguir ampliando su capacidad productiva, y también elevó un 16,5% las inversiones en R+D, hasta los 244,6 millones.
En paralelo, Grifols anunció ayer que ha iniciado el procés de refinanciación de su deuda bancaria mediante una nueva financiación por importe de hasta 5.300 millones de euros. Y es que la deuda financiera neta de Grifols se sitúa en los 5.803,6 millones de euros - sin contar el impacto de la nueva normativa contable e incluyendo 792,1 millones de euros en caja - y la compañía busca seguir recortando su nivel de endeudamiento.
Con todo, Grifols subraya que mantiene una sólida generación de caja operativa, que llega a los 339,2 millones de euros hasta septiembre, y concluye que puede emprender con solvencia los proyectos de crecimiento previstos. El beneficio bruto de explotación (Ebitda) llegó de enero a septiembre a los 1.066 millones de euros, un 13,5% más.
Por divisiones de negocio, la principal, denominada Bioscience, relacionada con la fabricación y comercialización de medicamentos derivados del plasma, generó 2.945 millones de euros, un 13,4% más, por la sólida demanda de las principales proteínas plasmáticas que produce Grifols. En concreto, las ventas de inmunoglobulinas siguen creciendo a doble dígito especialmente en EE.UU. y se han recuperado las ventas de albúmina en China.
Sobre la división Diagnostic, dedicada a la fabricación y desarrollo de aparatos, instrumentación y reactivos para la medicina transfusional, como las pruebas de tipo sanguíneo o las de compatibilidad entre donante y paciente previos a una transfusión, aportó 534 millones, un 3,2% más.
La división hospitalaria sumó unos ingresos de 93,7 millones, un 9,3% más, mientras que el renombre Bio Supplies, que integra principalmente las ventas de productos biológicos para uso no terapéutico, generó 186,4 millones hasta septiembre, un 142% más, y se consolida como la tercera división en volumen de negocio para la multinacional.
Grifols sigue generando dos tercios de sus ingresos, es decir 2.522 millones (67,5%) en los Estados Unidos y el Canadá, por un 16,9% del negocio total que supone la UE y un 15,6% aportado por otras geografías (ROW, Resto del Mundo, en la denominación usada por Grifols).
En paralelo, Grifols sigue avanzando en su ensayo clínico Ambar, para el tratamiento del Alzhéimer, y prevé presentar los resultados clínicos completos del ensayo, incluidos los datos relativos a neuroimagen, el próximo 6 de diciembre en San Diego (EE.UU.).