Grífols está teniendo una jornada bursátil complicada este miércoles después de que se haya sabido que está negociando una ampliación de capital de unos 2.000 millones de euros con el objetivo de reducir la deuda de 6.500 millones que arrastra la compañía y mejorar el apalancamiento. A las 12:00 h de este miércoles, el precio de la acción de la compañía catalana cae cerca de un 12% al Ibex-35 y situándose en 17,07 euros por título. Según ha adelantado El Confidencial esta mañana la farmacéutica estaría negociando con varios fondos de capital riesgo capaces de asumir la inversión. Además, el mismo diario añade que la negociación ya estaría en una fase muy avanzada, ya que tenemos que recordar que a finales del año pasado ya negociaron una operación parecida con el fondo norteamericano Hellman & Friedman, pero que finalmente acabó en nada.
Esta ampliación de capital llega porque actualmente Grífols tiene una deuda que se case siete veces superior al ebitda. Una ratio elevadísima que el año pasado intentó reducir con una operación de 800 millones con el fondo soberano de Singapur a través de la filial Biomat. Ahora bien, esta jugada no salió como se esperaba y provocó que los auditores lo marcaran como una deuda más, disparando el cómputo general. De esta manera, las informaciones publicadas están provocando la reacción bursátil de la firma y Grifols se sitúa como la compañía que más pierde del Ibex.
Desde la dirección de análisis de Sabadell han destacado que se trata de una noticia "negativa y no esperada". A su juicio, la ampliación permitiría rebajar la ratio de deuda financiera neta sobre el Ebitda a aproximadamente 3,6 veces, pero con un impacto "significativo". En esta línea, los analistas de Bankinter consultados por Efe creen que de confirmarse, la noticia sería negativa, ya que la ampliación de capital "sería con descuento con respecto a la cotización actual". "Una de nuestras preocupaciones es el apalancamiento de Grifols, reflejo de una estrategia agresiva de adquisiciones financiadas con endeudamiento", añaden los mismos expertos mantienen la cautela, y no varían el precio objetivo de la compañía, en 17 euros, prácticamente la cota que ya está alcanzando a las 12 de la mañana. Los expertos de Renta4 también consideran que el impacto de esta operación en la cotización de la compañía dependerá, en última instancia, del precio en el cual se negocie la entrada de los fondos. "En todo caso, la reestructuración y reducción de la deuda sería una noticia positiva para la sostenibilidad del negocio a largo plazo", destacan.
La jornada en el global del Ibex-35 no está siendo mucho mejor, ya que a las 11:45 h, el selectivo español, perdía 126,10 puntos, el 1,52% y se sitúa en 8.191,40 enteros. De hecho, la otra empresa catalana del Ibex, Fluidra cae un 8,11%, después de que haya lanzado su sexto programa de emisión de pagarés por valor hasta 150 millones de euros.