Iberdrola ha disparado sus beneficios en el primer semestre hasta los 2.075 millones de euros, lo que supone un 35,5% más que en el mismo periodo de 2021, a pesar del descenso de un 26% en los resultados de España, según ha informado la propia a la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El resultado bruto de explotación (ebitda) creció un 18,4%, hasta 6.443,9 millones de euros, con una evolución positiva en todas las geografías, exceptuando España. La cifra de negocios, por su parte, aumentó un 30,3 % en el semestre respecto a los primeros seis meses de 2021 y alcanzó los 24.430 millones de euros.
Iberdrola atribuye la caída del 26 % del beneficio neto en España fundamentalmente a los altos precios de la energía, que dice que no se han traspasado a los clientes con precios fijos acordados previamente. Los buenos resultados en el exterior y el incremento de las inversiones fueron los que contribuyeron al aumento del beneficio, según Iberdrola. El fuerte crecimiento en Estados Unidos, Brasil y Reino Unido, principalmente, como ocurrió en el primer trimestre de 2022, compensó el resultado adverso de Iberdrola España.
Las inversiones alcanzaron los 4.741 millones de euros en el semestre, con un incremento del 5%, y 10.200 millones en los últimos doce meses. De esta cuantía, el 90% se destinó a renovables y redes inteligentes. Como resultado de las inversiones ya realizadas, el grupo ha instalado 3.400 nuevos megavatios (MW) renovables en los últimos 12 meses y roza los 39.000 MW de capacidad renovable en todo el mundo. Además, cuenta con una cartera de proyectos que asciende a 95.000 MW, de los cuales 10.800 MW están en construcción o asegurados con contratos a largo plazo.
El 23% de la inversión, en España
En España, Iberdrola destinó casi 1.100 millones de euros de inversión en el primer semestre, el 23% del total. Además, invirtió 1.246 millones en Estados Unidos, 837 millones de euros en Brasil, 801 millones en el Reino Unido, 153 millones en México y 619 millones en el resto de países. Por negocios, el negocio de Redes del grupo obtuvo un beneficio neto en el primer semestre de 1.093,2 millones de euros, y el de Producción de Electricidad y Clientes, de 1.246,9 millones de euros.
Por otro lado, Iberdrola cuenta con una liquidez de 25.000 millones de euros, que le permitiría cubrir 27 meses de necesidades financieras sin recurrir al mercado. La deuda de Iberdrola se situó en el primer semestre en 41.717 millones de euros, incluyendo un efecto por el tipo de cambio de 1.863 millones, y el 75% de la deuda se encuentra a tipo fijo. Según la compañía, la deuda financiera aumentó un 14% (5.136 millones de euros) respecto a junio 2021, debido al esfuerzo inversor del periodo y a la significativa apreciación de las divisas.
Las amortizaciones y provisiones de Iberdrola crecieron en el semestre un 14,5% y alcanzaron los 2.521,6 millones de euros, con un impacto negativo del tipo de cambio de 129 millones de euros. Sin ese impacto, habrían aumentado solo un 8,6%, debido al crecimiento del grupo, la mayor base de activos en Redes y el incremento en el negocio de Producción de Electricidad y Clientes en capacidad instalada, además del aumento en la partida de provisiones por extraordinarios en Estados Unidos y Brasil.
En el actual contexto de crisis energética por la guerra en Ucrania, Iberdrola también ha señalado que no importa petróleo ni gas rusos. Asimismo, en un momento en el que el Gobierno de España ha anunciado que gravará con un impuesto los beneficios extraordinarios obtenidos por las compañías de energía, Iberdrola ha señalado que su contribución fiscal en el ejercicio pasado fue de 7.836 millones de euros, de los que cerca de la mitad, 3.469 millones, correspondió a España.