Lunes negro para los mercados mundiales, y también para España. El principal índice español, el Ibex 35, ha cerrado la sesión igual que la ha empezado: con pérdidas de más del 7%. Concretamente, el índice ha acabado la jornada con unas pérdidas del 7,96%, tocado por los efectos económicos del coronavirus (Covid-19) y la guerra del petróleo entre Arabia Saudí y Rusia. El índice ha iniciado la sesión con la peor caída desde el 2016 cuando se anunció el Brexit, y no ha podido recuperarse en toda la jornada.
La amenaza de una recesión por la pandemia mundial ha incrementado el miedo a los inversores y se trata de la peor caído desde el 2016, cuando se anunció el Brexit, día en que perdió un 12,35%. De esta manera, el índice cierra con 7.708,7 puntos, dejándose en la jornada 666,9 puntos.
Los valores españoles que más han caído son Repsol, que ha cedido un 15,13%, seguido del BBVA, que ha bajado 13,21% y Banco Santander con un descenso del 11,97%. Telefónica ha perdido el 9,81%, Iberdrola el 6,64% e Inditex el 4,96%.
Caen los mercados mundiales
La caída de la bolsa española ha ido acompañada del hundimiento de los mercados internacionales, así como de la bajada de las rentabilidades de la deuda alemana (menos 0,845%) y el norteamericano (0,52%) en mínimos históricos por el temor de los inversores al empeoramiento de la economía. Incluso Wall Street ha parado las cotizaciones durante 15 minutos después de hundirse un 7% en la apertura y tratando de evitar un hundimiento mayor. Lo mismo ha pasado en el Brasil, en que la bolsa de Sao Paulo ha tenido que detener durante media hora las operaciones a causa de la fuerte caída de su principal indicador, pero después de reprenderlas, el índice Ibovespa volvía a desplomarse un 8,88%.
A nivel europeo, la bolsa de París ha cerrado con pérdidas del 8,39%, la peor caída desde el 2008.
El precio del crudo, hundido
El precio del petróleo ha registrado un descenso del 30% este lunes. La caída llega después de que Rusia y Arabia Saudí no consiguieran llegar a un acuerdo para reducir la producción de barriles debido a la desaceleración económica provocada por el coronavirus. El pasado viernes, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), liderada por Arabia Saudí, propuso un recorte en la producción de 1,5 millones de barrios diarios para hacer frente a la caída de la demanda de las últimas semanas.
Rusia, sin embargo, rechazó el acuerdo, y Arabia Saudí decidió contraatacar. Ante la negativa del Kremlin, la petrolera estatal Aramco ha decidido incrementar la producción de crudo, una medida totalmente contraria al escenario que se planteaba inicialmente.