La inflación parece no tener traba y este mes de julio el IPC ha escalado hasta el 10,8% una cifra que no veíamos desde septiembre 1984, es decir el máximo en los últimos 38 años, según los datos avanzados del IPC publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los principales causantes de esta nueva subida han sido los alimentos y las bebidas no alcohólicas y la electricidad, que hace un año bajó los precios. Por el contrario, a diferencia de los últimos meses el precio de los carburantes ha bajado, pero sin impedir que el global de los precios se haya contagiado. Otro hecho preocupante es que la inflación subyacente, es decir descontando la energía y los alimentos no elaborados, también ha vuelto a aumentar este julio hasta el 6,1%, que de confirmarse sería la tasa más alta desde enero de 1993.
De este modo, la inflación encadena tres meses consecutivos de ascensos en su tasa interanual después de que en abril se moderara 1,5 puntos de golpe, hasta el 8,3%. Después, en mayo, escaló hasta el 8,7% y en junio superó los temidos dos dígitos (10,2%), algo que se vuelve a repetir en julio. Por el que hace la tasa mensual, en julio se registró una tasa de -0,2% respecto a junio, según el indicador avanzado del IPC.
Desde el Gobierno, concretamente desde el Ministerio de Economía, consideran que la inflación "es un fenómeno global y una de las principales consecuencias de las tensiones geopolíticas", que están generando "un incremento continuado de los precios de la energía, especialmente del gas, y también de los alimentos". Ahora bien, aunque esta afirmación es cierta, hay que recordar que en España la inflación mantiene la senda alcista que empezó en marzo de 2021 y que solo quedó interrumpida en enero, cuando se moderó 4 décimas hasta el 6,1%, y el mes de abril, cuando bajó un punto y medio, hasta el 8,3%, si excluimos estos dos meses el resto son subidas ininterrumpidas hasta este 10,8%.
Con respecto a la evolución mensual, los precios de consumo bajaron el 0,2% con respecto a junio, según este indicador avanzado. En el caso del índice de Precios al Consumo Armonizado (IPCA), que permite hacer comparaciones con otros países europeos, se sitúa en el 10,8%, ocho décimas superior a la registrada el mes anterior, igual que el índice general.
El dato de julio, tendrá que ser confirmado por el INE a mediados de mes que viene, pero de momento todo apunta que superará el pico conseguido el mes de junio pasado cuando el IPC se situó en el 10,2%, su nivel más alto desde 1985.