Mark Zuckerberg, Eric Hastings... son muchas las personalidades del mundo de la tecnología las que, a lo largo de los años, han pasado por el Mobile World Congress. Este año ha sido el turno del creador de Pay Pal, Tesla y SpaceX, el excéntrico multimillonario Elon Musk. Ahora bien, a diferencia de los otros, Musk no se ha desplazado hasta Barcelona, sino que lo ha hecho a través de videoconferencia por culpa de las medidas contra la Covid.

Aun así la puesta en escena para recibir Musk ha sido espectacular. Luces y música de discoteca, ojos expectantes, móviles alzados para captar el preciso momento en que la gran pantalla del escenario proyectara la cara del empresario y, por descontado, ordenadores abiertos para tomar notas.

Tocaban las 17:30 h cuando Justin Springham, editor de Mobile World Live, ha entrado en el escenario del Keynote Stage en medio de un fuerte aplauso, minutos más tarde, y por alegría de todo el público, era el momento, entraba en acción Elon Musk, que se ha llevado una gran ovación.

Durante su intervención, que aproximadamente ha durado media hora, Musk ha comentado que prevé llegar a los 500.000 usuarios de la red de Internet a través de satélites Starlink, su última inversión, sobre la que ha asegurado que espera tener cobertura por todo el mundo, exceptuando los dos polos, de aquí a uno más, durante el mes de agosto. Además, Musk ha asegurado que actualmente Starlink ya tiene más de 1.500 satélites activos, una capacidad en órbita superior a los 30 Terabytes por segundo y que está activo en doce países.

En este sentido, ha asegurado que la red "es un buen complemento a la fibra óptica y al 5G" y ha adelantado que puede ser útil para las compañías de telecomunicaciones como 'fecha bakchaul', es decir, como red para contener los enlaces intermedios entre el núcleo y los bordes.

Sobre su funcionamiento por todo el mundo, Musk ha detallado que ya cuenta con dos grandes acuerdos con empresas de telecomunicaciones, concretamente con "grandes compañías de telecomunicaciones nacionales", es decir americanas y ya está negociando con otras empresas para proveer el acceso a la red.

Estos avances en el proyecto hacen que Musk haya considerado que el precio del equipo para conectarse a Starlink, que incluye una pequeña parabólica, pueda pasar de los 500 dólares actuales, aunque él asegura que vale 1.000, a oscilar entre los 200 y 300 dólares. A este precio también se tienen que sumar otros 100 dólares mensuales que se pagan a modo de suscripción con el fin de conectarse a la red.

Ahora bien, por encima de todo, Musk ha asegurado que con Starlink solo tiene un objetivo, no acabar en quiebra, recordando que todos los proyectos similares de satélites de comunicaciones de órbita baja han acabado de esta manera.

Llegar a Marte

Ahora bien, Musk no solo ha hablado de su gran proyecto para las telecomunicaciones, sino que también ha dado un repaso a la situación actual de su gran proyecto Starship, que pretende crear una base en la Luna y una ciudad en Marte. Al respecto, ha asegurado que la empresa trabaja para "hacer un intento de lanzamiento orbital en los próximos meses".

Al mismo tiempo, ha explicado que este proyecto es el primer paso para crear, efectivamente, la deseada "base en la Luna y la ciudad en Marte" y ha señalado que, en sus palabras, está haciendo los máximos progresos posibles para iniciar los viajes interplanetarios y para conseguir el cohete más rápido diseñado hasta el momento.

Una vez ha acabado su exposición, se han abierto las luces y se ha roto el silencio que el público ha mantenido religiosamente durante toda la conferencia con un gran aplauso que Musk ha devuelto. Como con todo, también ha habido espacio un momento cómico cuando uno de los perros del multimillonario ha aparecido por detrás de la imagen.