La patronal catalana del ocio nocturno, Fecasarm, ha reclamado al Govern que acelere los trámites para la aprobación de la 5.ª línea de ayudas para el sector para paliar los efectos del cierre continuado del ocio nocturno durante el último año y medio. En más, alegan que las ayudas que han recibido hasta ahora, unos 40 millones de euros, cubren ni el 1% de las pérdidas, que llegan hasta los 6.000 millones de euros.
A través de un comunicado, la patronal reclama ayudas por valor de 100 millones de euros y que cada empresa que solicite esta nueva línea pueda recibir entre 84.000 y 590.000 euros en función del número de trabajadores y su aforo, teniendo en cuenta un universo total de 744 empresas que podrían ser beneficiarías de las mismas según datos proporcionados por la misma Generalitat.
Al mismo tiempo, la Fecasarm recuerda que con estas nuevas ayudas, en caso de que fueran aprobadas, solo se cubriría el 2% de las pérdidas acumuladas por el sector a causa de las restricciones. En este sentido también añaden que durante los 19 meses de cierre las empresas han tenido que seguir pagando el 50% del alquiler, tributos, parte de cotizaciones a la Seguridad Social y otros gastos a pesar de no haber podido abrir.
Además, recuerdan que todavía hay restricciones en el sector que no les permiten trabajar al 100% de su capacidad, como por ejemplo que el aforo está limitado al 70%, aunque este mismo martes el Govern ha anunciado que pasará al 80% cuando lo avale el Procicat. Sin embargo, el sector critica que estas restricciones "limitan" su capacidad de reacción y aseguran que si el acceso se encuentra sometido en el certificado Covid el aforo no tendría que ser ni de un 70 ni de un 80% sino de un 100%.
El secretario general de la patronal, Joaquim Boadas, carga contra el Govern por esta situación asegurando que "es evidente que el Ejecutivo no ha cumplido con su palabra porque ha aprobado medidas restrictivas de máximos y ayudas ínfimos y, si no tenía recursos suficientes para paliar las durísimas restricciones impuestas, se tendría que haber esforzado un poco el jefe al buscar fórmulas que hicieran compatible el derecho a la libertad de empresa y la protección de la salud".
Además, Boades añade que en lugar de escuchar las demandas del sector, el Ejecutivo "mantuvo en todo momento unas medidas desproporcionadas y arbitrarias que fomentaron los botellones y los desórdenes públicos, al mismo tiempo que arruinaban a todo un sector económico del cual dependen 37.000 familias en Catalunya y a las que ahora tiene la obligación moral ineludible de compensar".
Cierre de muchos locales
Por otra parte, desde la patronal también aseguran que hay muchas empresas del sector ubicadas en localidades turísticas que ya han cerrado por haber finalizado la temporada y a las cuales se les ha impedido poder facturar durante el verano para disponer de reservas durante el invierno. En este sentido aseguran que ya han trasladado a la Generalitat la urgencia que tienen estas actividades de recibir las ayudas pendientes y por eso hemos pedido celeridad en su aprobación.
Al mismo tiempo también recuerdan que durante este año y medio muchos locales han tenido que cerrar y que aquellas que no se encuentran al corriente de pago de tributos o Seguridad Social "injustamente tampoco podrán acceder a los mismos dado que precisamente las restricciones que se tienen que compensar han estado las causantes de que no puedan cumplir este requisito necesario para ser beneficiarías".