"El coche es mucho mejor que un matrimonio", ha asegurado el tricampeón de Fórmula 1, Lewis Hamilton, después de declarar su amor incondicional a la tecnología y reconocer que no le gusta conducir por la carretera porque "hay tráfico".

Después de la mediática conferencia del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, este martes ha sido el turno del piloto británico de 31 años. Coincidiendo con la primera sesión de pruebas de la pretemporada en Montmeló, donde este lunes se atrevió a dar 155 vueltas y perder 2 kilos de peso, Hamilton ha sido el encargado de debatir sobre la tecnología móvil dentro del sector automovilístico acompañado por el director técnico de Mercedes AMG Petronàs, Toto Paddy, y el presidente de Qualcomm Inc, Derek Aberle. Tampoco ha faltado el coche de Fórmula 1 con el que ganó el campeonato de 2015.

¿Es el coche o el piloto?

"Cuanto más rápido aprendemos, más rápido corremos", ha indicado Hamilton en referencia a todas las ventajas que comporta el uso de tecnología en el mundo de la Fórmula 1. Más allá de la gran cantidad de big data que se encargan de procesar sus ingenieros, el piloto tiene la oportunidad de recibir constantemente feedback de las estadísticas de sus carreras.

Más tecnología sí, pero la pregunta vuelve a ser la misma de siempre, ¿gana el coche o el piloto? Paddy ha respondido "50 a 50". "Cuando pones a los dos juntos, tienes un campeonato del mundo", ha añadido. Pero el secreto vuelve a estar nuevamente en la tecnología, ya que según el técnico, "todo tiene que ver con la innovación tecnológica que diferencia tu coche". Más conocimiento tecnológico, más información y mejor comprensión para saber cómo ganar.

El coche del futuro

"En un futuro, el coche estará conectado a todo", ha manifestado inicialmente Aberle. El Internet de las cosas aplicado al sector automovilístico permitirá evitar accidentes, aumentar la conectividad, reducir las congestiones de tráfico y establecer una comunicación directa de coche a coche. Pero antes, hay que probarlo en la Fórmula 1. "Si consigues que te funcione allí, entonces es fácilmente comercializable", ha subrallado el presidente de Qualcomm Inc. El GPS, la visión computacional, el aprendizaje mecánico, la fusión de sensores y una conectividad más estable y rápida son algunas de las herramientas que estarán muy vinculadas al coche del futuro (o cada vez más presentes).

Y antes de irse con una selfie de su público, Hamilton ha asegurado que es "muy competitivo" y que se siente "con mucha energía para volver a competir" por su cuarto campeonato con un coche que es "todavía más potente" que el del año pasado. Sin embargo, más allá de exhibiciones y tests de prueba, tendrá que esperar hasta el 20 de marzo en Melbourne para materializar su voluntad en las pistas de Fórmula 1.