La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha dado luz verde a un nuevo servicio internacional de transporte de viajeros en tren de alta velocidad entre Madrid y Montpellier, con parada en Barcelona. Se trata de un tren que no sería operado por Renfe sino por Intermodalidad de Levante (ILSA), empresa filial de la valenciana Air Nostrum.
Según un informe de la CNMC, este tren de Air Nostrum sería más barato y más rápido –tardaría un 10% menos respecto de lo que opera a Renfe-. "Este nuevo servicio tendrá efectos positivos para los usuarios, dado que triplica las frecuencias entre Madrid y la ciudad francesa y las incrementa en un 50% desde Barcelona, asegura Competencia". Concretamente, el tren conectará Madrid y Barcelona con tres departamentos franceses, que suman una población de casi 2 millones de habitantes.
Los trámites
El servicio ferroviario se podrá liberalizar en España cuando se invierta a la legislación española el cuarto paquete ferroviario de la Unión Europea, aprobado en diciembre del 2016. Hasta entonces, sin embargo, la CNMC sí que permite que haya líneas internacionales operadas por otros operadores que pasen por España si al menos el 20% de la distancia total se recorre fuera del Estado y si las compañías transportan al menos el 30% de los pasajeros con origen o destino internacional.
La CNMC ha decidido dar luz verde al tren de ILSA después que la empresa se comprometido a limitar la venta de billetes al estado español en caso de que se supere el 70% máximo fijado. También se ha comprometido a aportar información semestral sobre el número de viajeros entre las diferentes estaciones y los ingresos obtenidos. A partir de ahora, la CNMC analizará la petición de ILSA para poder utiltizar los trenes de la serie S-100 de Alstom, propiedad de Renfe Lloguer.