El mundo del tatuaje, de primeras, puede parecer un mundo muy underground, o como mínimo eso es lo que era hasta hace unos años. Ahora bien, ya hace más de dos décadas que ha ocurrido todo un arte y los tatuadores ya no son gente que se dedica a tintar al cuerpo de sus clientes, en muchas ocasiones se han vuelto verdaderos artistas que en lugar de pintar sobre una tela, sino que lo hacen sobre nuestras pieles. Si se quieren datos del sector, cada mes, solo en España, hay ocho millones de buscas con el objetivo de hacerse un tatuaje, piercing, eliminación o micropigmentación, y durante el 2021 el sector generó un volumen de negocio superior a los 180 millones de euros. Además, un 42% de la población española lleva tatuajes a su piel, siente el sexto país del mundo con más porcentaje de población tatuada.
Ante este contexto, los catalanes Casandra Vicente y Gerard Hernández decidieron crear Oshun, una plataforma para poner en contacto a los artistas con sus potenciales clientes, un modelo de negocio que ya está presente en muchos otros sectores como los viajes o las reservas hoteleras con empresas como Booking o Airbnb. En su caso, actualmente ni en Catalunya ni en España hay un perfil de startup parecido al mercado y con los dos años de vida de la empresa ya han conseguido que más de 250 artistas de la demarcación de Barcelona hayan decidido confiar en su plataforma para llegar todavía a más clientes. El objetivo de la empresa, más allá de poner en contacto a artistas y clientes, es poner en valor un sector muy dinámico que a estas alturas todavía tiene muchas carencias.
Es por eso que se han propuesto digitalizar y optimizar los procesos para contratar los servicios a la vez que se deja de depender de "canales de venta no afines en el sector". Además, también quieren dejar atrás el déficit de estándares de calidad de los servicios de body art y también combatir la falta de información, conocimiento y confianza de los clientes, de hecho sin una licencia acreditada los artistas no pueden anunciarse a su página web. Además, la plataforma permite a los clientes poder acceder a un perfil de cada artista, ver su portafolio para poder facilitar la decisión y el estilo en el cual tatúan, una tarea que hasta ahora los tatuadores realizaban a través de las redes sociales, pero que ahora ya está concentrada en una sola página web.
Modelo de negocio y perspectivas de futuro
En el ecosistema startups uno de los principales retos para todo proyecto es qué modelo de negocio quieren aplicar y si es viable a largo plazo. En este caso, Casandra Vicente ha explicado a ElNacional.cat los planes de futuro de Oshun que implican abrir su primera ronda de financiación con el objetivo de levantar 150.000 euros para mejorar técnicamente la plataforma, darse a conocer y poder contratar más personal. Todo para llegar a toda España cuanto antes mejor, concentrándose en los tres principales mercados del Estado, Barcelona, donde ya tienen una capilaridad importante, Madrid, donde ya han hecho la primera incursión, y Valencia. Después de cumplir este propósito, Vicente también ha asegurado que el próximo paso será dar el salto en Europa, un mercado realmente atractivo sin ningún competidor claro en esta materia.
De cara al modelo de negocio, como en otros sectores, Oshun funciona a través de comisiones. En su caso, cada vez que alguien cierra una cita con un artista para tatuarse, la empresa se lleva una pequeña parte para la mediación del servicio, exactamente el mismo mecanismo que Booking con las reservas de hoteles.