Una guerra entre dos de las principales patronales catalanas se cuece dentro de las cúpulas. La patronal de las pequeñas y medianas empresas, Pimec, ha asegurado hoy que se trata "de una discusión que hace más once años que dura" por el tema de la representatividad, es decir, qué porcentaje representan las patronales. Según el presidente de Pimec, Josep González, "nosotros damos representación a todas las pymes, que conforman el 99,8% del tejido empresarial catalán, y tendríamos que tener un mayor porcentaje". Así lo ha dicho durante el tradicional desayuno de Navidad, en la que ha hecho también un balance de la situación empresarial y política del momento.
La pugna por la representatividad es uno estira y encoge entre patronales que no se acaba de aclarar. En este sentido, González ha sido tajante: "No vemos seriedad por parte de Foment para llegar a un acuerdo", y ha asegurado que desde Foment se está intentando alargar la pugna con "excusas que no sirven".
De hecho, el tema de la representatividad es clave para las patronales, ya que lo que se reparte a partir de este porcentaje son las sillas, los votos y las aportaciones económicas que los tocan, cosa que se traducen en ayudas y poder en la negociación colectiva. De momento, está implementado que Foment tiene un 60%, Fepime un 15% y Pimec un 25%, pero Pimec reclama que se anule la representatividad de Fepime, ya que forma parte de Foment, y se restablezca la paridad entre Foment y Pimec.
Según González, "nosotros con un 50% de representatividad estaríamos contentos" aunque considera que si se pusieran a contar, "a Pimec le correspondería un 70%". Así, se ha mostrado molesto con las declaraciones que el presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre, ha hecho respecto del tema, asegurando que "él dice que son muy generosos pero lo que hacen es alargar el problema".
El conflicto "que nunca acaba"
Es ya once años de debate sobre este tema, pero hasta ahora Pimec no había estado tan tajante. El conflicto real empezó cuando, después de años de quejarse de los porcentajes establecidos, el junio pasado el Tribunal Supremo ratificó que la Generalitat podía analizar la representatividad de las patronales, y el mes de julio, después de una reunión con los secretarios generales de las patronales y la Conselleria de Trabajo, se establece que si no se llega a ningún acuerdo amistoso, tendrá que tomar parte el Gobierno para decidir los porcentajes.
En este momento, según explica Pimec, se acuerda que se otorgará una representatividad paritaria (50-50) por Foment y Pimec, pero González explica que más tarde Foment se echa atrás y "pide más tiempo alegando que son elecciones a la patronal". Unos meses más tarde, cuando Sánchez Llibre ya es formalmente el nuevo presidente de Foment, los dos presidentes no consiguen ponerse de acuerdo, acercándose ya a la fecha límite para pactar, el próximo viernes 14 de diciembre. Si este día no se ha conseguido llegar a un consenso, la decisión la tomará la Generalitat, que "tendrá que contar para decidirlo".
Pimec, convencida
"Desde Foment tienen miedo a contar porque saben con que saldrán perdiendo", asegura el líder de Pimec. Según González, Pimec tiene varios indicadores que demuestran una mayor representación sobre Foment, entre los cuales nombra que "los ingresos por cuotas en Pimec son el triple que a Foment, tenemos más empleados, más presupuesto y representamos al 99,8% del empresariado catalán". Así, las quejas de la patronal de pymes es clara: "Es muy lamentable lo que hace Foment, nos están tomando el pelo".
Con todo, González asegura que "querríamos que se llegara a un acuerdo justo" de manera que la Generalitat no se tenga que involucrar, porque "no estamos sumando porcentajes, estamos sumando acciones". Y es que se trata de una guerra abierta que está dejando heridas, ya que según ha apuntado el presidente de Pimec, esta pugna hace que las dos patronales "no trabajamos bien juntas".